El característico sonido de la lluvia fina y persistente al caer despertó ayer a los valencianos. Pero, una vez más, las precipitaciones se dejaron sentir principalmente en el litoral. Por ejemplo, en Guadalest se registraron 86 litros por metro cuadrado en las últimas 48 horas, mientras que en Benidorm el agua acumulada fue de 77 litros. En Valencia y Alicante llegaron a 40 litros. A pesar de que el agua es muy beneficiosa para los cultivos –en abril, aguas mil, dice el refrán–, los embalses no han salido tan beneficiados de la borrasca que se ha instalado encima de la Comunitat. En el pantano de Contreras, que se encuentra en el límite de las provincias de Valencia y Cuenca, se han registrado en las últimas 48 horas 34 litros. En el pantano de Benagéber, ya en la cuenca del río Turia, las precipitaciones han sido todavía más escasas. En total se han contabilizado 26 litros.
Las precipitaciones apenas dejaron incidencias en las carreteras. En Elche, un vehículo se precipitó al río Vinalopó, mientras que en el interior de Castellón cayó en forma de nieve. Hoy la inestabilidad remite, se abrirán grandes claros y las temperaturas máximas experimentarán un ascenso.