La Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO) mostró ayer su satisfacción ante la decisión adoptada en la última Comisión de Desembalse del Júcar. Según explicó el presidente de la JCRMO, Agustín González, en la Comisión se decidió por vez primera acabar con los desembalses «a demanda» que hasta ahora se realizaban.
González indicó en este sentido que la política seguida hasta ahora era la de realizar esos desembalses cuando los usuarios tradicionales valencianos necesitaban el agua.
De esta forma se producían momentos en los que apenas discurrían dos metros cúbicos de agua por segundo mientras que en otros se llegaba hasta los 28 o 30 metros cúbicos por segundo con el consiguiente perjuicio para el equilibrio del río. En la Comisión celebraba el pasado miércoles se decidió desembalsar de forma constante desde Alarcón ocho metros cúbicos de agua por segundo hasta el mes de septiembre. González aseguró que de esta forma se da la razón a lo que siempre ha defendido la Junta Central de Regantes y es que «el río Júcar sea un río y no un canal».
Robo de cobre
Por otra parte, los regantes de la Mancha Oriental se reunieron ayer con el subdelegado del Gobierno en Albacete, José Herrero Arcas, para plantearle una situación que preocupa a estos agricultores como es el constante saqueo al que ven sometidas sus explotaciones en todo el acuífero.
El motivo de estos robos no es otro que conseguir cobre, un preciado metal de gran valor y muy cotizado entre los «amigos de lo ajeno». González manifestó que en los últimos años los robos de instalaciones de riego con elementos de cobre se han convertido en una constante. Por su parte Herrero aconsejó a los regantes que denuncien siempre estas situaciones.