Los regantes del Tajo-Segura pedirán un nuevo desembalse de agua de los pantanos de cabecera para cubrir sus necesidades del último trimestre del año. El volumen rondará los 100 hectómetros, una cantidad similar a la reclamada el año pasado. El presidente del Sindicato Central, Francisco de Amor, tiene previsto reunirse la semana que viene con el director general del Agua, Jaime Palop, para estudiar la situación en la que se encuentran los embalses de Entrepeñas y Buendía.
Ambos embalses contienen actualmente unos 350 hectómetros cúbicos, de los que 110 se consideran oficialmente excedentarios. El rechazo del Gobierno de Castilla-La Mancha ya ha sido anunciado por su vicepresidente primero, Fernando Lamata, quien apuntó el jueves que las reservas son inferiores a la media histórica.
Próxima reunión
La Comisión de Explotación del Acueducto Tajo-Segura deberá reunirse este mes para estudiar los nuevos desembalses. Unos 40 hectómetros serán asignados para los abastecimientos hasta diciembre. No obstante, las moderadas temperaturas de este verano han impedido que el consumo de agua se haya disparado entre la población abastecida por la Mancomunidad de Canales del Taibilla, que sobrepasa los 2,5 millones de habitantes en esta época.
Los regadíos lo tendrán más complicado si el Gobierno exige que se mantenga una reserva estratégica en cabecera, como en años anteriores.