La elaboración de los nuevos planes hidrológicos estará finalizada en el año 2009. Así lo explicó ayer el subdirector del general de Gestión Integrada del Dominio Público Hidráulico del Ministerio de Medio Ambiente, Jesús Yagüe, que asistió ayer en Albacete a la reunión que mantuvieron los comisarios de todas las cuencas hidrográficas españolas con el objetivo de coordinar las políticas en materia hidráulica en todo el territorio nacional.

Yagüe recordó que, tal y como marca la normativa europea, el nuevo panorama hidrológico español tendrá que estar terminado para el año 2009, y entre ellos sobresale el Plan Hidrológico del Júcar. Para ello, confió en que a finales del 2008 los técnicos tengan ya aprobados los documentos que se abrirán a la participación pública con el objetivo de que durante ese ejercicio y el 2009 se puedan presentar las alegaciones pertinentes.

El responsable del Ministerio alegó que con esta nuevo marco normativo de las cuencas hidrográficas «entraremos en una nueva cultura del agua, porque ahora seremos exigidos por la Unión Europea para el cumplimiento de la directiva marco y en caso de incumplimiento se impondrán sanciones muy duras». Puntualizó que en el caso de incumplimientos por parte de las Comunidades Autónomas el estado será el sancionado por lo que el Gobierno tendrá que buscar mecanismos para hacer cumplir la normativa a las autonomías que la incumplan.

Participación pública

Tras el periodo que se abrirá a la participación pública la nueva regulación de los planes de cuenca estará plenamente operativa, según Yagüe, para el 2010.

En este sentido, el comisario de aguas de la cuenca del Júcar, Manuel Alcalde, que asistió a la reunión, explicó que tanto los usuarios como las administraciones ya están preparadas para asumir este cambio «porque sería impensable que no lo estuvieran tras tres años de intensa sequía». En la reunión de ayer se abordaron temas «de gran trascendencia» como la elaboración de un plan de choque contra los vertidos «para controlar y mejorar cada vez más la calidad de los ríos con un notable incremento en las inversiones». Yagüe reseñó que el Gobierno está apostando por un programa de restauración de los ríos que prevé la recuperación de los sistemas fluviales, de los ecosistemas y de los sistemas terrestres asociados a los ríos, «con importantes inversiones».

Así, el comisario de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Júcar aclaró que la calidad de las aguas del río es «buena, más que aceptable».

A juicio de Alcalde, no existe mucha presión sobre el Júcar ni en la provincia de Albacete ni en Cuenca «donde no hay grandes industrias que realicen vertidos al río» que garantiza unos buenos niveles de calidad de las aguas. No obstante, admitió que hay algunos puntos sobre los que actuar, aunque no concretó en cuáles. Otro proyecto importante que maneja el Ministerio, y que estará finalizado a la vuelta de tres años, será un programa de cartografía de zonas inundables que persigue que todo el territorio nacional esté radiografiado para prever por donde pueden discurrir las avenidas de agua en el caso de lluvias intensas, cuáles son las zonas que tienen un mayor riesgo de sufrir inundaciones en caso de tormenta «para prevenir todos esos peligros para los ciudadanos».

Registro informatizado

Otro reto en el que está enfrascado el Ministerio es la elaboración de un registro de aguas informatizado que permita agilizar la tramitación de los certificados sobre derechos de agua que se emiten.

El responsable ministerial argumentó que Medio Ambiente está cambiando las tendencias en materia de inversiones en materia de presas y embalses. «Ya no se apuesta tanto por la construcción de nuevas infraestructuras sino por el mantenimiento y conservación para garantizar la seguridad».