El proyecto para conducir agua desde el acueducto Tajo-Segura a la llanura manchega, cuyo objetivo principal es garantizar el abastecimiento para consumo doméstico a una población de aproximadamente 500.000 habitantes, no necesita declaración de impacto ambiental.
Según ha informado hoy el Ministerio de Medio Ambiente en un comunicado, la resolución fue publicada el pasado viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El proyecto pretende garantizar agua, en condiciones de calidad y cantidad, a 50 núcleos de población repartidos en una superficie de unos 13.000 kilómetros cuadrados en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
Otro objetivo será regenerar hídricamente la denominada Mancha Húmeda, en la que se ubican las Tablas de Daimiel, y lograr a largo plazo la recuperación de los principales acuíferos.
Para ello, se sustituirán los recursos subterráneos empleados actualmente en abastecimiento de poblaciones por recursos procedentes del acueducto.
El promotor asume ‘un amplio elenco de medidas preventivas y correctoras’ para evitar una potencial afección a espacios de la Red Natura 2000 y otros espacios naturales protegidos, según el Ministerio.