El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural ha autorizado al Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura la compra de 31,5 hectómetros cúbicos de agua a la comunidad de regantes madrileña de Estremera después de que las lluvias de las últimas semanas hayan permitido la recuperación de los embalses del alto Tajo. La comunidad de Riegos de Levante anunció ayer que los recursos se pondrá a la venta a razón de 10 minutos por tahúlla.
Los 31,5 hectómetros en origen se convertirán en 30 en destino una vez descontadas las mermas que se producen durante el transporte desde los pantanos de Entrepeñas y Buendía. Riegos de Levante recibirá una cuarta parte del caudal.
La operación de compra estaba acordada entre las partes desde finales del año pasado, pero no se había podido llevar a cabo debido a las escasas reservas de los embalses del Alto Tajo, en donde almacena el agua la comunidad de regantes madrileña.
La legislación impide enviar caudales a las zonas dependientes de esta infraestructura por debajo de los 240 hectómetros de reservas en estos pantanos. Además, el abastecimiento es prioritario sobre la agricultura, lo que viene complicando en los últimos años de sequía el envío de agua a los regadíos dependientes del trasvase de Alicante, Murcia y Almería.
El portavoz de Riegos de Levante, Ángel Urbina, explicó que la cuarta parte de los caudales que recibe el sindicato corresponden a esta comunidad. Sus responsables anunciaron ayer un reparto de 10 minutos por tahúlla cuando un riego completo equivale a una hora. Para llegar a los 10 minutos se suma el agua de Estremera, los caudales procedentes de Estremera y un hipotético trasvase desde el Alto Tajo que el Gobierno debería de aprobar antes de octubre.
Los regantes confían en que el Consejo de Ministros autorice un desembalse para este verano, aunque las actuales reservas de Entrepeñas y Buendía no garantizan a día de hoy una decisión de este tipo.
El Sindicato Central de Regantes va a pagar seis millones de euros a la comunidad de Estremera por la compra de estos 31,5 hectómetros. El precio del metro cúbico sale a 18 céntimos de euro (30 pesetas) a los que hay que añadir el gasto derivado del transporte.
Urbina reconoció que este precio es más alto que el que se pagará por los caudales procedentes de los pozos de sequía del Segura y del que se paga por el agua trasvasada habitualmente desde el alto Tajo. Aún así, el portavoz de la comunidad de regantes anunció que los precios de venta al agricultor se van a mantener para no castigar más la economía de los regantes.
El agua se podrá adquirir a partir de hoy en las ventas programadas con anterioridad por las comunidades de base. La distribución podrá comenzar antes de que el agua esté físicamente aquí puesto que se utilizarán los recursos del pasado año hidrológico que muchos agricultores guardan para este verano.