Serna valoró así en un comunicado la «apuesta» de Rajoy por la presidenta de los populares castellano-manchegos como secretaria general del partido, que, recordó, «se ha destacado públicamente por poner fecha de caducidad al trasvase Tajo-Segura» y advirtió de la «difícil posición» en la que queda Camps «de cara a su Congreso de Valencia».
La vocal de la Gestora socialista aseguró que Camps «cada día está más aislado en su obsesión por el trasvase del Ebro» tras la designación de Rajoy y las enmiendas del PP de Aragón a la ponencia económica que se debatirá en el cónclave popular con el objetivo de que «desaparezcan las referencias a los trasvases».
Serna consideró que el PP de Aragón y Castilla-La Mancha están «haciendo la pinza a Camps con la bendición de Rajoy» y le recomendó que aproveche la ocasión para «firmar la paz hídrica con sus compañeros de partido de estas comunidades y de otras comunidades, sumándose al Pacto del Agua que promueve el Gobierno de España».
En el mismo sentido, instó a Camps a «defender de verdad y donde toca los intereses de los valencianos y convencer a De Cospedal para que no sea tan talibán con el trasvase Tajo-Segura». La diputada socialista acusó al presidente del PPCV de «abrir una nueva vía de enfrentamiento en sus propias filas» al «pretender imponer sus políticas de provincias, en este caso hídricas, al resto de territorios».
La parlamentaria del PSPV-PSOE aseguró que el PP «pretende mantener el engaño que salió a la luz durante las pasadas elecciones con la exclusión del trasvase del Ebro del programa electoral de Rajoy», algo que consideró «imposible» tras el cónclave nacional.
Serna reiteró, por otra parte, que los socialistas «no rechazamos los travases, siempre y cuando sean viables y el del Ebro no lo es porque no cumple los criterios medioambientales, sociales y económicos». Como ejemplo, citó el Júcar-Vinalopó que, según dijo, «boicotea el PP valenciano».