La Comisión de Cambio Climático del 37 Congreso Federal del PSOE aprobó hoy las dos enmiendas presentadas por el PSOE de Murcia en materia de agua, un Pacto de Estado y la necesidad de acometer trasvases que sean «social, económica y medioambientalmente viables», según explicó hoy el secretario general de los socialistas murcianos, Pedro Saura.
en declaraciones a los periodistas desde el Palacio de Congresos Municipal de Madrid, donde este fin de semana se celebra el cónclave socialista, Saura valoró como «muy positiva» para la Región de Murcia la aprobación de las dos enmiendas, un aspecto que, según informaron fuentes socialistas, fue muy debatido en el interior de la comisión por la definición del término ‘trasvase’.
De hecho, según explicó el propio Saura, la delegación de Castilla- La Mancha votó en contra de las enmiendas murcianas que permitirán que la dirección socialita plantee un Pacto Nacional de Agua, que contemple la desalinización y las transferencias de agua a las zonas que lo necesiten, siempre que sean «social y económicamente viables».
Saura subrayó que durante el plenario de ayer ya planteó a los 995 delegados la necesidad de dicho pacto y las transferencias de agua. El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero «recogió ese guante» y hoy ha sido posible que las comisión saque adelante las dos enmiendas defendidas por los delegados murcianos.
«Hemos ganado esa votación porque se ha entendido que era necesario, señaló el socialista murciano. La ponencia marco de los socialistas recoge, incluida las enmiendas murcianas, que el PSOE ha obtenido «éxitos en las mejoras de la productividad de la agricultura, pero no tanto en la prevención de las injustas o negativas consecuencias sociales y medioambientales asociadas a esos éxitos».
Reconocen que no se ha prestado «la atención requerida a cuestiones como la pérdida de biodiversidad, o al déficit de provisión de agua» por lo que consideran que «es hora de poner en marcha políticas que eviten o minimicen estos efectos».
Así, apuestan por «continuar con la política del agua desarrollada en los últimos cuatro años, para garantizar el consumo, presente y futuro, a toda la población y aplicar de forma adecuada y eficiente, con solidaridad y consenso, la gestión de los recursos hídricos a través de modernización de conducciones, ahorro de consumo, desalinización, reutilización, modernización de regadíos».
En el texto de la ponencia se señala, como adelantó Saura, que hay que continuar con «aquellas transferencias del recurso (agua), a través de las infraestructuras hidráulicas necesarias, que sean viables económicamente, medioambientalmente sostenibles y socialmente aceptadas».
Apuesta por energías renovables
Por otro lado, la Comisión de Cambio Climático también aceptó un enmienda a la ponencia marcho en la que se hace una apuesta «decidida» por el desarrollo de las energías renovables frente a la proliferación de nuevas centrales nucleares.
Según recoge el documento final, es una «apuesta fundamental de los socialistas en el camino hacia el nuevo modelo de crecimiento energéticamente sostenible».
El texto socialista no prevé promocionar «nuevos paquetes nucleares» aunque sí respetar la vida útil de las actuales centrales y, al respecto, insta a «extremar con todo rigor la garantía de seguridad» desde la acción de gobierno y del organismo regulador correspondiente, así como su «permanente actualización tecnológica».
Los socialistas consideran que España tiene «las condiciones naturales necesarias», «la tecnología más avanzada» y cuenta con «empresas líderes» en el desarrollo de la energía renovable. El PSOE cree que es «una gran oportunidad para ocupar un lugar avanzado en el mundo» por lo que llama a asumir «desde el principio que esa es nuestra opción y que, estratégicamente, sólo esa opción tiene un futuro seguro».
«Tendremos que asegurar las exigencias que nos plantea la continuidad de nuestro crecimiento con un uso energético cada vez más eficiente y austero, y con la provisión de las distintas fuentes de energía», añade.