El portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología, Ángel Rivera, ha observado que durante ese primer semestre del año hidrológico el déficit de precipitaciones (comparadas con las habituales en ese periodo) se elevó en algunos lugares hasta el 40 por ciento. En declaraciones a Efe, el meteorólogo ha precisado que las lluvias posteriores, sobre todo las precipitaciones que se registraron en primavera, han aliviado la situación y han permitido reducir el déficit hasta el 11 por ciento. Según el análisis realizado por la Agencia Estatal de Meteorología, el año hidrológico ha sido «ligeramente seco», y las precipitaciones medias acumuladas han sido de 579 litros por metro cuadrado. La primera mitad del año resultó «extremadamente seca», de forma que el período de seis meses comprendido entre el 1 de octubre de 2007 y el 31 de marzo de 2008 fue el de menos precipitaciones medias en España de todos los períodos análogos de la serie histórica que se inició en 1947. La última primavera fue en cambio «muy lluviosa», de forma que las precipitaciones de los meses de abril y mayo, que fueron «muy húmedos», compensaron en buena medida el importante déficit de precipitaciones que se había ido acumulando a lo largo de los meses de otoño e invierno. Así, el déficit medio acumulado pasó del 40 por ciento (1 de abril) al 9 por ciento (mediados de junio) y al 11 por ciento (al cierre del año hidrológico). Las precipitaciones de los meses veraniegos de julio y agosto fueron en general «bastante escasas», y en septiembre los valores han sido similares a los registros históricos, según las mismas fuentes, que han concluido que el año ha sido en su conjunto «ligeramente más seco de lo normal». Respecto a la distribución geográfica de las precipitaciones acumuladas en el año, las precipitaciones han superado los valores medios en Valencia, La Rioja, Navarra, Baleares, la mayor parte de Murcia, en el sureste de Castilla-La Mancha, la mitad este de Castilla y León, en las islas más occidentales de Canarias y en algunas zonas dispersas de Aragón, Cataluña y Andalucía. En el resto de las regiones, en general, no se ha llegado a compensar el déficit de lluvias del período otoño-invernal, de forma que las precipitaciones quedan incluso por debajo del 75 por ciento de sus valores medios en buena parte de Galicia, Asturias y el noroeste de Castilla y León, así como en el oeste de Castilla-La Mancha, algunas zonas de Extremadura, este de Andalucía y parte del archipiélago canario. En áreas de Galicia y de Andalucía oriental, el déficit de lluvias ha llegado a alcanzar el 40 por ciento de los valores medios.