Aplauden la decisión de eximirles directamente del pago de los cánones y tarifas por el uso del agua
MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) –
La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) manifestó hoy su satisfacción por la aprobación del Real Decreto Ley de ayudas contra la sequía, por considerar que contribuirá a «aliviar» las pérdidas económicas derivadas de la falta de lluvias en las cuencas del Júcar, Segura, Guadiana y Guadalquivir, así como la subida de costes derivados del encarecimiento de la factura eléctrica desde el pasado mes de julio.
El nuevo decreto establece ayudas para los regantes que hayan recibido la mitad del agua necesaria para sus cultivos, así como la exención de los pagos derivados de la utilización del agua de riego.
En este sentido, Fenacore aplaudió la decisión del Gobierno de eximir a regantes afectados por la sequía de los pagos de la cuota de la tarifa de utilización del agua y del canon de regulación, así como de las aportaciones correspondientes a los gastos fijos y variables establecidos para sufragar los costes de conducción de aguas.
La Federación venía manteniendo conversaciones con el Ministerio de Medio Ambiente desde hacía meses para la aprobación de esta normativa en los términos planteados.
Asimismo, Fenacore valoró positivamente que el departamento que dirige Elena Espinosa asuma por tercer año consecutivo la situación de sequía, eximiendo directamente a los regantes del pago de las tasas y cánones de regulación, en lugar del aplazamiento que tradicionalmente concedía y que suponía una acumulación de deuda que finalmente terminaba en exención.
La Federación recordó que durante esta campaña de riego, buena parte de los agricultores de las cuencas del Guadiana, Guadalquivir, Júcar y Segura sufrieron importantes restricciones de agua en sus regadíos, lo que les obligó a reducir o variar sus plantaciones al inicio de la campaña para adaptar sus cultivos a la escasez de agua disponible, así como a conformarse con cosechas propias del secano, «mucho menos rentables».
Según Fenacore, esta exoneración económica supone un «reconocimiento explícito» al esfuerzo que han realizado los regantes en la modernización de regadíos pero recordó que la transformación de regadíos debe ir acompañada de otras medidas complementarias.
