La semana pasada nueve organizaciones ecologistas, ciudadanas y sindicales, tanto estatales como del ámbito de la Comunitat Valenciana y Castilla La Mancha, elaboraron una declaración conjunta para denunciar la "falta de voluntad política" por parte de la administración central y de estas dos autonomías, que mantiene "paralizado" el nuevo Plan de la Cuenca del río Júcar.

Puxeu, que se reunió este miércoles en Valencia con el conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, José Ramón García Antón, realizó estas declaraciones al ser preguntado acerca de esta queja de las asociaciones ecologistas. Una sentencia del Tribunal Supremo exige desde noviembre de 2004 que la Generalitat asuma la gestión de los ríos internos.

En este sentido, el secretario de Estado reconoció que aunque hay "una necesidad y una obligación de una definición, esa necesidad y esa urgencia del ámbito jurídico debe hacerse de acuerdo a unos intereses sociales de los ciudadanos, la preservación en el ámbito ecológico y la racionalidad en cualquier tipo de actuación". Del mismo modo, insistió en que "no es cierto que no se esté trabajando" y recalcó que "hay técnicos trabajando desde hace mucho tiempo, incluso antes de la sentencia".

Por otro lado, el conseller, preguntado acerca de un informe de la Confederación Hidrográfica del Ebro que admite que una reducción de un 11 por ciento de su caudal ecológico no pondría en peligro la supervivencia del río, consideró que este documento "coincide con las tesis del Gobierno valenciano".

Así, destacó que se trata de un informe "importante" y afirmó que las tesis del Consell defienden que "el caudal ecológico era más que suficiente, y que había muchas veces al año en que se aumentaba ese caudal". Añadió que "esas aportaciones externas no tendrían que ser permanentes ni regulares, si no en función de unas características y unas necesidades en la cuenca".

Al respecto, Puxeu recordó que la planificación hidrológica este año se realizará de "una forma muy participativa, lo cual conllevará un balance que, en la mayoría de las cuencas, va a ser bastante neutro". También destacó que "la suma de oferta y demanda bien gestionada, no tiene que dar problemas ni a los ciudadanos ni al estado ecológico del río".

Así, señaló que "habrá zonas donde se produzca un déficit que se tendrá que corregir", y en el caso concreto del Ebro, subrayó que toda la planificación se tiene que hacer teniendo en cuenta que esta cuenca "tiene un nivel alto de regulación con escenarios bastante complicados". En cualquier caso, concluyó que "cuando tengamos toda la planificación podremos decir cuáles son las capacidades y potencialidades de cada sistema".

Normativa europea de fertilizantes

Puxeu se pronunció también sobre la nueva normativa europea acerca del uso de fertilizantes en las explotaciones agrícolas, a preguntas de los periodistas. Subrayó que el estado español ha llevado a cabo una "presión importante", así como "un criterio de prudencia, sin perder la defensa de la salvaguardia de la salud". De este modo, valoró que "el esfuerzo" ha permitido "reducir mínimamente la lista de productos autorizados, pero dando un tiempo para incorporar productos menos agresivos".

El secretario de Estado apuntó que estas normas tienen que respetar "la salud de los ciudadanos consumidores y también la de los ciudadanos que aplican estos productos", aunque matizó que "un cambio radical conllevaría una explosión de pérdida de competitividad".