Se acabó la sequía en el río Júcar. Los pantanos encargados de embalsar el agua de la que se abastece buena parte de Valencia no se encontraban en tan buena situación desde marzo de 2001, cuando Alarcón, Contreras y Tous disponían de 595 hectómetros cúbicos. En la actualidad almacenan 600 hectómetros cúbicos.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues, afirmó el pasado 22 de diciembre que en marzo de 2009, si los embalses seguían llenándose, el mayor río de la Comunitat Valenciana abandonaría la situación de sequía. Y eso es lo que hoy va a constatar la comisión permanente de sequía.
Las precipitaciones registradas en la Comunitat durante el otoño y las nevadas caídas en las provincias de Teruel y Cuenca desde octubre hasta febrero, junto a la continua restricción de agua que han sufrido los agricultores de la Ribera y l’Horta y también los de Albacete, han propiciado que se recuperen los niveles de los pantanos del Júcar.
La CHJ decretó la situación de sequía en el Júcar en octubre de 2005. Las presas de Alarcón, Contreras y Tous almacenaban entre ambas 216,75 hectómetros, cuando su capacidad total de embalse es de 1.781 hectómetros. Bien es verdad que ninguno de los tres se ha llenado nunca.
Restricciones
La situación mejoró en la primavera de 2006. El 7 de marzo de ese año los tres mencionados pantanos embalsaban 595 hectómetros, casi como ahora. Pero sólo fue un espejismo. A partir de ahí empezaron las restricciones para los regadíos valencianos y también para los manchegos. Esas restricciones nunca han ido dirigidas al consumo de pueblos y ciudades.
El 6 marzo de 2006 la reserva del Júcar era de 280 hectómetros, un año después bajó a 231 y el año pasado era de 256,18 hectómetros. El último parte del estado de los embalses indica que Alarcón, Contreras y Tous disponen de 600 hectómetros, prácticamente el doble que la media de la última década.
Cuando se inició el actual año hidrológico, el 1 de octubre de 2008, los tres mencionados pantanos disponían de 264 hectómetros. En cinco meses han aumentado las reservas un 220%
En vísperas de Navidad, el presidente de la CHJ se mostró optimista sobre el fin de la sequía y el trío de embalses tenía 366 hectómetros, cuando la media de los últimos 10 años era de 360.
Pese a que enero y febrero no han sido especialmente lluviosos en el interior de la Comunitat, los embalses, gracias a las precipitaciones habidas en Teruel y Cuenca, han ido llenándose semana a semana. Así, en el primer mes del año entraron 56,3 hectómetros en Alarcón, Contreras y Tous, mientras que en febrero fueron 101,3 hectómetros.
El secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, anunciaba en Sueca el pasado lunes que gracias a la buena situación en la que se encontraban los embalses del Júcar, el riego estaba garantizado para este año y el próximo.
No obstante, los agricultores, pese a que van a disponer de mayor cantidad de agua que en los últimos cuatro años, son cautos y conscientes de las dificultades que han sufrido y que en la mayor parte de la Comunitat Valenciana las sequías se alternan con años de abundancia hídrica.
El presidente de la acequia de Sueca y vicepresidente de la Federación Valenciana de Regantes, José Fortea, afirmaba ayer que hay que ser cuidadoso a la hora de utilizar el agua porque cuesta mucho de embalsar y si se utiliza alegremente se pierde de un modo muy rápido.
Fortea, que también forma parte de la Unión Sindical de Usuarios del Júcar (Usuj), participará en la reunión de la comisión permanente de sequía. «No nos han comunicado el orden del día y, sinceramente, los regantes no nos esperábamos esta reunión porque, afortunadamente, ahora estamos bastante bien. Hay agua en los embalses», señaló Fortea.