Los responsables de las organizaciones agrarias Asaja, UPA y Coag llevaron ayer al portavoz socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, las demandas de Castilla-La Mancha en materia de agua, reflejadas «por el consenso de todo el pueblo» en la propuesta de reforma del Estatuto de Autonomía. Un texto que por falta de acuerdo entre los dos grandes grupos en Madrid, lleva casi un año y medio atascado en la Cámara baja. Por ello el mensaje fue claro: «El Estatuto se tiene que aprobar cuanto antes, con o sin consenso», y debe «garantizar todas las necesidades de agua de la comunidad», explica a La Tribuna el secretario regional de Asaja, José María Fresneda.
«No entramos en el debate político, nos da lo mismo quien se ponga de acuerdo con quien, lo que queremos es que se cumplan todos los compromisos adquiridos con Castilla-La Mancha en materia de agua», advierte Fresneda.
Dentro de las reivindicaciones hídricas regionales, los agricultores también se acercaron a Madrid con dos exigencias para Moncloa: que cumpla con lo acordado en el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG) y cubra las obras pendientes en el Plan Hidrológico Nacional. A juicio de las organizaciones agrarias, si el Estatuto «sale bien», el PEAG «se cumplirá».
UNA reserva irrenunciable. El ‘atasco’ político del Estatuto se reduce únicamente a la cuestión hídrica, que cuenta con el rechazo frontal de Murcia y Valencia. A día de hoy, está encima de la mesa de negociación la propuesta socialista de crear una reserva de agua en Castilla-La Mancha de 6.000 hectómetros cúbicos, que es irrenunciable para los agricultores. Como dicen, «la Región lleva cediendo agua toda la vida».
Para Fresneda, la cuestión no es acabar con la «injusticia» del trasvase Tajo-Segura ni de fomentar «guerras de agua» entre comunidades, «lo que queremos es garantizar nuestras necesidades presentes y futuras de agua».
«El debate no lo estamos generando nosotros, viene desde otras comunidades. Nadie puede cuestionar nuestra solidaridad y lo que queremos es que salga adelante el Estatuto con nuestra reserva estratégica», recalca.
Reivindicaciones que fueron escuchadas por José Antonio Alonso, que se comprometió a «trabajar por el consenso», según explica el responsable regional de UPA, Julián Morcillo.
«No venimos a pedir nada que no sea garantizar nuestro futuro» y «no atentamos contra nadie», añade Morcillo, insistiendo en que es preciso aprobar la citada reserva hídrica para la comunidad.
Por su parte, Coag, representado por Alejandro García Gasco, subraya que el agua es vital «para la vertebración de la Comunidad» y la «viabilidad de las explotaciones agrarias». En este sentido, asegura «echar de menos» al PP, que, dice, no ha tenido la iniciativa de recibir a los responsables agrarios y escuchar sus propuestas.
Esta reunión entre los agricultores castellano-manchegos con Alonso llega dos días después del polémico encuentro entre el portavoz socialista y los regantes murcianos, celebrado ‘de rebote’ y que llegó a ser desautorizado por el PSOE regional. Y es que, en un primer momento, la reunión prevista no era con el portavoz socialista, sino con Soraya Sáenz de Santamaría, con el objeto de acercar al PP su rechazo a la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha. No obstante, la portavoz popular ‘esquivó’ el encuentro, que terminó en el despacho de su ‘contrario’ socialista.
Los socialistas se comprometen a «forzar» el acuerdo con el PP
c.s.r./ agencias / Toledo
Alejandro Alonso, diputado socialista por Toledo, valoró positivamente la reunión mantenida con los agricultores castellano-manchegos, comprometiéndose a «forzar» el acuerdo con el PP para sacar adelante la reforma del Estatuto regional.
«Los socialistas no hemos ahorrado ni un solo esfuerzo en este sentido, por eso, la verdad es que desearíamos un poquito más de compromiso por parte de los dirigentes ‘populares’ para poder desbloquear de una vez y aprobar nuestro Estatuto», apuntó Alonso.
En este sentido, confirmó que en la actualidad se siguen manteniendo contactos entre el Grupo Socialista y el Grupo Popular, contactos que confía «puedan culminarse con éxito».
No obstante, advirtió que si no hubiera ese deseado consenso con el Partido Popular, los socialistas buscarían «otros caminos» para poder llevar a buen puerto el Estatuto castellano-manchego. «Si finalmente el PP no quiere venir con nosotros, tendremos que aprobarlo sin ellos», aseguró.
Para Alonso, «Castilla-La Mancha tiene todo el derecho a que las Cortes Generales de respuesta a su propuesta».
Respuesta popular. Por su parte, la senadora ‘popular’ Carmen Riolobos, desautorizó el encuentro entre el PSOE y los agricultores castellano-manchegos, que calificó de «paripé» e «improvisación». A su juicio, el fin de esta «foto» del PSOE con las organizaciones agrarias de la Región es el de «tapar» la reunión que mantuvo Alonso dos días antes con el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura. «Están dando un auténtico espectáculo», concluyó.