"Desde la unidad de los regantes valencianos, estamos totalmente en contra de la reserva hídrica del Tajo, y vamos a seguir defendiendo que esta medida no siga adelante, porque, de lo contrario, significaría el fin del Trasvase Tajo-Segura, tan necesario para las comarcas alicantinas y el desarrollo de toda la Comunitat", aseguran en una nota desde Fecoreva.
Así, los regantes de la Comunitat consideran la aprobación de la reserva hídrica del Tajo un "ataque frontal contra la Comunitat Valenciana, ya que no sólo amenaza al regadío, sino también los abastecimientos urbanos, por lo que va en contra de todos los ciudadanos".
En este sentido, recuerdan que, gracias al Tajo-Segura, más de 55.000 hectáreas de cítricos, hortalizas y frutales reciben el agua que necesitan cada año, así como los suministros urbanos y turísticos de las comarcas del Bajo Segura, Bajo Vinalopó, Medio Vinalopó y el propio Alicante.
"Sin los 160 hectómetros cúbicos que el Tajo-Segura aporta a los alicantinos, la segunda provincia de la Comunitat no podría alcanzar el grado de desarrollo del que goza actualmente", advierten.
Pero, además, "no sólo significaría el fin del trasvase Tajo-Segura, sino que representaría una seria amenaza para el embalse de Alarcón y, por tanto, pondría en peligro la supervivencia del río Júcar y gran parte del regadío valenciano, así como el abastecimiento de la propia ciudad de Valencia, ya que el 80 por ciento del agua que ésta consume procede del Júcar", añaden los regantes.
Fecoreva manifiesta su apoyo al Ejecutivo valenciano en defensa de la solidaridad colectiva y el reclamo de un gran acuerdo a nivel nacional para garantizar el suministro de agua en toda España, en cantidad y calidad suficiente.
Del mismo modo, la Federación también respalda al presidente Francisco Camps en su defensa de los intereses de la agricultura de la Comunitat.EFE