El PSOE regional lo tiene claro, había un pacto entre Valcárcel y Rajoy para tumbar el Estatuto de Castilla-La Mancha en su tramitación en el Congreso y Cospedal era conocedora, y copartícipe, del mismo. La razón de esta connivencia con el presidente murciano es, según los socialistas, mantener «sin problemas» su puesto como secretaria general de los populares. En palabras de Esther Padilla, «Cospedal ha puesto los cuernos a los castellano-manchegos para salvar su sillón en la calle Génova».
Una afirmación que la responsable de Comunicación del PSOE basa en las informaciones aparecidas en la prensa murciana este fin de semana sobre la existencia de un pacto ‘popular’ desde el pasado diciembre para cortar las aspiraciones hídricas de Castilla-La Mancha. Pacto que nace de un órdago del presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, que amenazó con dimitir y que obtuvo a cambio el compromiso de Rajoy de que «todo va a salir como tiene que salir».
En este sentido, Padilla incluye en la terna de este pacto a Cospedal. Como número dos del PP nacional, «lo sabía, y si no se entera de lo que se negocia en su partido, lo ha permitido, que es aún más grave». «Sabía lo que iba a pasar y durante este tiempo ha estado engañando a los castellano-manchegos, pidiendo prudencia en la negociación», denuncia.
Donde sí estaba a ciencia cierta Cospedal es en la reunión en el Congreso donde Valcárcel impuso su propuesta al PP y se materializó la «traición» contra Castilla-La Mancha, añade la responsable de comunicación de los socialistas.
Con alevosía. A su juicio, el enfrentamiento abierto en torno a la fallida reforma del Estatuto de Autonomía no es «un tema de confrontación entre PSOE y PP», «es una traición y con alevosía, sabía que todo estaba cerrado desde el pasado diciembre», insiste.
Por todo ello, Padilla exige a Cospedal que se retracte. «Si tuviera decencia política, debería dar explicaciones, la hemos pillado poniendo los cuernos a Castilla-La Mancha y le toca justificarlo».
Un pacto del que el PP regional no parece haber oído hablar y que tacha de «falso». Según el diputado Leandro Esteban, es una «fabulación de Barreda» para «intentar salvar la cara».
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, lamentó que tanto en Aragón como en Valencia como en Murcia «todo el mundo ha hecho lo que territorialmente se espera de ellos» en relación a sus respectivos estatutos de autonomía, a excepción de la presidenta regional del PP y secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal.
En declaraciones a Antena 3, Barreda se refirió así a la retirada del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha y lamentó que tanto en el texto de Aragón, donde el PP puso como condición una reserva hídrica, como en Valencia, como en Murcia, donde los socialistas han apoyado al presidente de la región, Ramón Luis Valcárcel, «en su lucha para defender sus intereses», todo el mundo ha hecho lo que se espera de ellos «todos menos Cospedal».
Barreda se preguntó si es culpa suya que Cospedal «cambiara de opinión» y votara en el Congreso de los Diputados «algo distinto a lo que votó en las Cortes de Castilla-La Mancha», si es culpa suya que la líder del PP «atienda a los planteamientos de Valcárcel y no a los planteamientos de la Mesa del Agua en Castilla-La Mancha».
«Ha llegado a decir que es algo personal mío, el Estatuto de Autonomía, confundiéndolo todo», señaló José María Barreda, que advirtió de que «no es una cuestión personal, es una cuestión del conjunto de la sociedad y siempre quise que la reforma se hiciera por unanimidad».
«Ya no se debía solo a Castilla-La Mancha, ya tenía que estar también pensando en la opinión de Camps y de Valcárcel», concluyó.