La Junta Central de Usuarios del Vinalopó pedirá al Ministerio de Medio Ambiente la construcción de un nuevo punto de toma del trasvase Júcar Vinalopó. El presidente de este organismo, que aglutina a los usuarios potenciales del trasvase, Andrés Martínez, insistió en que se puede construir una toma en el azud de Antella, a tan sólo 15 kilómetros de la actual, y donde el agua es de mayor calidad. La actual, situada en el azud de la Marquesa, serviría para «hacer circular el agua» y «tendrá una función medioambiental».
La Generalitat ha mostrado ya en alguna ocasión su predisposición a financiar esta obra. Martínez aseguró que si se coge desde este punto el agua, será más asequible y se darán compensaciones a los usuarios del Júcar.
Esta cuestión, además del coste del agua, debe resolverse para que el trasvase pueda funcionar. Martínez avanzó que confían en que este mismo mes puedan mantener una reunión con el secretario de Estado de Agua, Josep Puxeu, para cerrar, o al menos avanzar el convenio en el que se establezca cuánto se pagará por este agua y qué calidad tendrá. Dijo además que los agricultores no pueden pagar más de 0,15 euros el metro cúbico y que el resto deberá recaer sobre los abastecimientos.
El presidente de los Usuarios del Vinalopó pronunció ayer una conferencia organizada por la cátedra de la Fundación Agua y Progreso y la Universidad Politécnica de Valencia, en la que defendió la creación de bancos de agua, para que los agricultores de cualquier punto de España puedan vender las concesiones que les otorgan las confederaciones hidrográficas. No obstante, para poner en marcha esta iniciativa «es imprescindible que haya conducciones», por lo que en un futuro próximo se podría hacer entre regantes del Júcar, pero no con los del Ebro, por ejemplo, porque no existe ningún canal.
El Ministerio de Medio Ambiente también debe dictar las normas de explotación del trasvase del Júcar, así como definir el ámbito de la cuenca.