La secretaria de Comunicación del PSOE, Esther Padilla, aseguró que la secretaria general del PP y presidenta de la formación en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, no opina sobre la proposición de ley sobre agua que el Gobierno de Castilla-La Mancha llevará a las Cortes Generales por «cobardía» y para «no enfrentarse» a los presidentes autonómicos de la Comunidad Valenciana y de Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel.
En rueda de prensa en la sede del PSOE, Padilla respondía así a las declaraciones de la número dos del PP realizadas este fin de semana en Albacete, en las que cuestionaba que el Gobierno de España vaya a apoyar la proposición de ley de Barreda —que recogerá las demandas sobre agua que contenía el frustrado Estatuto de Autonomía— de la que «todavía no sabe qué contenido tiene».
Para Padilla, Cospedal «se esconde» tras el «desconocimiento» cuando tiene que opinar de agua, algo que considera «preocupante» en una dirigente política que aspira presidir Castilla-La Mancha.
«No me creo que ignore el contenido de la proposición de ley que se llevará a las Cortes. Sabe perfectamente cuál es su contenido», señaló Padilla, recordando que va en la línea de lo que pedía el Estatuto.
Así, Padilla se refirió a «los riesgos que corre» Cospedal si entra a opinar sobre agua debido a su doble cargo en el PP como secretaria general y presidenta del partido en Castilla-La Mancha. «No es desconocimiento, es cobardía para no enfrentarse a los presidentes Camps y Valcárcel y es una traición a los intereses de Castilla-La Mancha», subrayó.
En cuanto a la proposición de ley que Castilla-La Mancha llevará al Congreso, Padilla avanzó que la iniciativa hará hincapié en el cumplimiento de la Directiva Marco sobre agua que exige el mantenimiento de un caudal ecológico de los ríos, algo que, según ha apuntado, es «incompatible con los intereses del Levante y con los trasvases desde la cabecera de un río». En este sentido, dijo que se trata de garantizar el caudal ecológico de las cuencas.