Agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Albacete, en colaboración con efectivos de la Benemérita y la Policía Local de Jumilla (Murcia) han desarticulado una banda dedicada al robo de hilo de cobre en estas dos provincias, en la denominada Operación Retiro, que se ha saldado con la detención de siete personas y la incautación de 2.630 kilos de hilo de cobre y 14.000 litros de gasóleo.
La operación comenzó el 29 de enero del presente año, cuando se produjo un robo en la Cooperativa San José de Ontur, en el que los delincuentes se hicieron con 6.000 litros de aceite envasado, botellas de vino y un ordenador. Estos hechos delictivos, comienzan a relacionarse con otros robos con fuerza producidos en la comarca de Hellín, especialmente el acaecido en una cantera, en la que se sustrajo cable de cobre y otros en los que se sustrajeron 1.500 litros de gasóleo B, 700 litros de gasoleo A y más hilo de cobre.
En la investigación, resulta clave un robo, en el que se utiliza un camión para transportar todo el material sustraído, en el que al vehículo se le rompe el cárter, dejando un rastro de aceite, que va hasta un almacén de Jumilla, en el que se estaban depositando objetos robados.
De esta forma se detecta uno de los locales en los que este grupo estaba almacenando el material robado.
Aunque en la operación se ha recuperado mucho material, lo cierto es que la banda se hizo con muchas más mercancías que no se han encontrado, ya que se deshacían de ellas con mucha rapidez, para evitar correr riesgos y obtener beneficios lo antes posible.
Los detenidos
Con esta operación, la Guardia Civil ha detenido a un total de siete personas, de las cuales, sólo cinco de ellas formaban parte de la banda, como resaltaba Díaz Cano. «Un dato positivo de esta operación es que a parte de detener a los integrantes del grupo, que eran cinco personas, también se ha detenido a otras dos personas relacionadas con un delito de receptación, que eran los que estaban comprando cobre o habían llegado a un acuerdo para comprar el cobre robado por 9.000 euros».
De los siete arrestados, cuatro de ellos son ciudadanos españoles, mientras que el resto son de nacionalidad lituana y todos ellos residían en las localidades murcianas de Jumilla y Abarán. Tras las detenciones, que se produjeron el 13 y el 14 de octubre, sólo permanecen en prisión los dos cabecillas de la organización, un español y su esposa de nacionalidad lituana con antecedentes penales, mientras que el resto se encuentran en libertad con cargos.
Las diligencias de los robos con fuerza están siendo llevadas por el Juzgado de lo Penal número 2 de Hellín, mientras que las referentes a drogas están en manos del Juzgado de Jumilla.