Se trata de un «instrumento del que nos queremos dotar», decía el consejero de Agricultura, José Luis Martínez Guijarro, «para simplificar la gestión de las ayudas en Castilla-La Mancha».
Una forma con la que seguir dando pasos en materia de administración electrónica para la gestión de las ayudas. De esta manera, y con la actualización conveniente de este registro, los propios agricultores «no tendrían que aportar datos cada vez que se abre una convocatoria de ayudas», entre otras, las de la Política Agraria Común.
Precisamente de las ayudas de la PAC quisieron hablar los representantes de los agricultores durante la celebración del Consejo Asesor Agrario celebrado ayer en Toledo. Julián Morcillo, de UPA, valoraba la inclusión de la agricultura y la ganadería como sectores estratégicos en la Estrategia 2020 de la UE, de ahí la importancia del presupuesto. «Para nosotros lo más importante es que tengamos un documento consensuado», dijo.
Ángel Villafranca, de Cooperativas agroalimentarias, destacó la necesidad de que las explotaciones tengan la «dimensión suficiente» para mantener su viabilidad. Para Fernando Villena, de Asaja, la clave está en aumentar la asignación para llegar a la media nacional y europea, mientras que Alfonso Marín, de COAG-IR, recordaba que la UE ya no son 15 países, sino 27 para repartir el presupuesto.