El conseller de Medio Ambiente, Juan Cotino, exigió ayer al Gobierno que garantice el agua necesaria para el mantenimiento de los regadíos históricos del Júcar, una extensión de 40.000 hectáreas que produce, fundamentalmente, arroz, cítricos, frutales y hortalizas. El vicepresidente se refería de esta forma a las intenciones del futuro plan de cuenca del río, que prevé una reducción del 40% en la dotación anual que recibe la Unidad Sindical de Usuarios del Júcar (Usuj), tal y como publicó LAS PROVINCIAS.
El conseller también aludió al riesgo que existe para los regantes como consecuencia de la ley del Agua de Castilla-La Mancha, que prevé una reserva hídrica que obligaría a reducir el caudal que llega a la Comunitat.
A su juicio, la normativa, que debe remitirse al Congreso de los Diputados para su valoración, provocaría problemas de abastecimiento, teniendo en cuenta que gran parte del agua que se consume en el área metropolitana de Valencia procede del río.