La Plataforma Contra el Cementerio Nuclear en la localidad valenciana de Zarra reivindicó ayer en Madrid los valores ambientales de la localidad y de su entorno, para justificar que éstos son motivos suficientes para que quede descartada como sede del almacén temporal centralizado (ATC).
En una rueda de prensa previa a la jornada que celebraron ayer en el Ateneo de Madrid bajo el lema ‘El ATC y el plan energético nacional’, el portavoz de la citada plataforma, José Cerdá, recordó que la parcela que Zarra ofrece para ubicar el cementerio nuclear está rodeada de 2.500 hectáreas de bosques, entre los que destacan puntos de interés ambiental como el monte Atalaya, Los Cerricos, Los Cuartos y Las Pedrijas.
Cerdá aseguró, además, que en la ubicación propuesta por el alcalde del municipio -«sobre el que pesan graves acusaciones de corrupción», según apuntó- existe un importante acuífero que abastece también a la provincia de Albacete y es un territorio enclavado entre dos Zonas de Especial Protección para las Aves (Zepa).
Traslado a Llamazares
La plataforma ha elevado esta argumentación ambiental para que Zarra sea descartada como sede del ATC a través del eurodiputado de IU, Willy Meyer, que ayer mantuvo una reunión con el portavoz de IU en el Congreso, Gaspar Llamazares para exponerle esta situación.
Por su parte, el portavoz de Nucleares de Greenpeace, Carlos Bravo, que también participa en la jornada, hizo hincapié en que la construcción del ATC no es «ni urgente, ni necesaria, ni una opción barata».