Los fantasmas de la sequía parecen espantados de momento. Los embalses están como no se conocía en muchos años y por toda la geografía manan con abundancia fuentes que hace poco estaban muy menguadas y hasta secas.
La evidencia más notable de esta situación de bonanza en cuanto al agua disponible nos la muestra el embalse repleto de Banagéber, sobre el río Turia, cuyas reservas son especialmente vitales para el abastecimiento de Valencia capital y de su área metropolitana, así como para el riego agrícola en las comarcas de la Huerta y Camp de Turia.
Desde el pasado jueves, Benagéber está lleno a rebosar, hasta el punto de que desagua por su peculiar aliviadero de superficie. En el último estadillo de la Confederación Hidrográfica del Júcar, de ayer mismo, aparece al 100,13%; más que lleno, lo que ofrece unas garantías de al menos dos años aunque no lloviera nada.
Sobre el sistema Júcar-Cabriel, que abastece regadíos y abastecimientos de La Ribera y L’Horta, incluido parte del suministro de Valencia, el pantano de Alarcón, el más grande, alberga ya 649 hectómetros cúbicos, de una capacidad total de 1.118, con lo que supera el 62%, una cota realmente histórica, desconocida en décadas, y sigue subiendo semana tras semana; en la última, 7 hectómetros y pico. Este embalse sólo se llenó del todo una vez, al principio de los años 70.
En el río Cabriel, el embalse de Contreras está al 50,60%, pero aquí no cabe esperar mayor mejoría, porque la seguridad de una de las presas no permite subirlo mucho más.
Más abajo, en La Ribera, el embalse de Tous se acerca a los dos tercios de su capacidad, con 239,52 hectómetros sobre 378,6.
En Castellón, el Regajo, sobre el río Palancia, está al 91,4%. En el sistema Mijares, el Sichar está al 92,9%, Alcora 70,19% y Arenós 42,78%. En Alicante, Amadorio se mantiene en el 59,06%, Guadalest en el 57,63% y Beniarrés 73,92%.
El conjunto de la cuenca hidrográfica del Júcar se encontraba ayer a un 59,02% de su capacidad, con un aumento en la última semana de 20,73 hectómetros. Aún así, es en estos momentos la cuenca menos favorecida de España, cuando la media de todos los embalses del país queda por encima del 82%.
La cuenca del Segura, que se ha mantenido durante muchos años en la posición de farolillo rojo, ahora supera a la del Júcar en porcentaje de agua sobre su capacidad total, con el 72% de reservas.
La cuenca española que se encuentra más llena es la del Guadiana, al 92%. Le siguen la Cataluña, con el 88%, la del Guadalquivir con el 87% , País Vasco 85%, Duero 84%, Ebro 80% y Tajo 78%.
En esta última es de destacar la mejoría de los embalses de Entrepeñas y Buendía, de donde parte el trasvase Tajo-Segura, vital para comarcas de la mitad sur de Alicante y de Murcia que apenas tienen otro recurso. Los dos suman 1.274 hectómetros, el 52% de su capacidad.