En Albacete existe una infraestructura de canales diseñada para desaguar la zona colindante a la ciudad que hoy se ha convertido en un Camino natural.
A lo largo de la historia son muchas las construcciones, vías de comunicación e infraestructuras de todos tipo que se han construido con un fin determinado y que con el paso del tiempo han perdido su función original. Muchas de ellas han sido pasto de los años y han quedado en el olvido sembrando nuestras tierras de ‘ruinas’. Sin embargo otras muchas han sido reutilizadas cambiando completamente el sentido de su construcción para evolucionar hacia las nuevas demandas. Un ejemplo de esta ‘adaptación’ urbanística la encontramos a las afueras de Albacete donde se puede apreciar como unos canales concebidos para la conducción de aguas han desembocado en un camino natural; es el caso del Camino natural del Canal de Mª Cristina y sus ramales. Retrocediendo y haciendo un poco de historia encontraremos que su construcción data del reinado de Carlos IV, allá por el año1804, cuando detectaron la necesidad de conducir las aguas estancadas que rodeaban a la ciudad de Albacete dándole salida hacia el cercano río Júcar. Con el paso del tiempo el nivel freático de las aguas descendió perdiendo la utilidad para las que fueron creadas. Una parte, la que está ocupada por la ciudad fue reutilizada como colector urbano. El resto, a pesar de que en un principio contribuyeron a recuperar tierras baldías para uso agrícola, quedaron en desuso hasta que fueron convertidas en un camino natural. Contribución a la saludAl igual que en un principio contribuyeron a mejorar las condiciones sanitarias de la población de la zona, en la actualidad también juega un papel importante ayuda a mejorar las condiciones de salud de la población ya que para los vecinos de Albacete y los números turistas que cada año se acercan hasta esta ciudad manchega, el entorno se ha convertido en un lugar idílico para la práctica del deporte en especial aquellos más tranquilos y reposados. Y es que si antaño eran aguas estancadas las que circulaban por estos canales, hoy estan llenos de personas de todas las edades, desde jóvenes que los recorren haciendo footing a nuestros mayores degustando un agradable paseo. Su orografía y la tranquilidad de la zona por la que transcurre la convierte en una de las rutas más utilizadas para pasear siendo muy transitada incluso en las calurosas noches de verano. Pero además de contribuir a mejorar la salud de los ciudadanos también supone una oportunidad única para muchos de los negocios de la zona ya que su origen, en el Parque de la Fiesta del Árbol, está cerca del núcleo urbano. De hecho en este parque existe un servicio de alquiler de bicicletas para aquellos que prefieran recorrer esta parte de la historia sobre un transporte cómodo y ecológico.Disposición del caminoEn la adaptación de esta infraestructura para contribuir al desarrollo de la zona, se distribuyó el recorrido del camino en cinco ramales coincidiendo con los ramales más importantes de esta obra de ingeniería. El recorrido principal conocido como del Canal de María Cristina, comienza en el parque Fiesta del Árbol, a las afueras de Albacete, y continúa por la margen derecha del Canal de María Cristina. Para conocer las características del entorno un panel informativo, en los primeros metros del recorrido, dando información geográfica y geológica de la zona. Durante el recorrido el viandante debe pasar por el paso subterráneo de la N-430 avanzando por el margen de la izquierda del canal para cruzar un puente a escasos 200 metros retornando al margen derecho del canal por donde avanza durante unos tres kilómetros hasta un área recreativa con agua potable denominado “El Palo”. El camino cruza otro puente para continuar por la margen izquierda del canal hasta llegar 230 m después a una bifurcación que marca el fin de este recorrido. La segunda etapa del recorrido, conocida como Canal de los ojos de San Jorge, pare del final del trazado principal por el camino de la derecha en paralelo al Canal de El Acequión. Al igual que el principal debe salvar por pasos subterráneos las vías de comunicación que les rodean de camino al al área recreativa Huerta del Rey. En este punto el trazado se bifurca en la convergencia con el Canal de El Acequión y toma el camino de la izquierda, paralelo al paraje Huerta del Rey. A 120 m del p.k. 7 el recorrido alcanza el cruce con la Vía Verde a Alcaraz y continúa por el camino que sale perpendicular a ésta. El recorrido atraviesa después el cruce por el que se accede al vecino Canal de Acequión y a la Ruta del Quijote. Pasada una zona habilitada para realizar ejercicio, el camino describe suaves curvas hasta alcanzar el área recreativa situada al final del mismo.Tercera etapaConocido como el Canal del Acequión se trata de un recorrido de unos diez kilómetros de longitud partiendo del área recreativa de Huerta del Rey tomando en la bifurcación el camino de la derecha cruzando su recorrido con la Vía Verde de la Sierra del Segura, aunque antes habremos dejado atrás un área de descanso. Continuando nos encontraremos con el ramal Ojos de San Jorge a 7,4 Km del final sorteando en varias ocasiones la N-430. A la izquierda del trazado se sitúa un área deportiva, mientras que la ruta avanza por un trazado recto para acercarse a una finca. Al poco de pasar el p.k. 14, alcanza un puente tras el que continúa por la margen izquierda del canal hasta alcanzar el final del recorrido en la laguna seca de El Acequión.La parte finalLas dos últimas etapas, del Canal del Salobral y del Canal de La Estacadilla. La primera de ellas sirve como comunicación con la pedanía albaceteñas de Aguas Nuevas destacando la parte final del recorrido donde el canal vuelve a tener agua y cruza con la Cañada Real Andaluza. Para terminar el Canal de La Estacadilla parte del paraje del Palo para comunicar con la Vía Verde de Alcaraz donde se puede contemplar unas compuertas antiguas del canal ya restauradas. En definitiva un entramado de caminos con un destino común; el desarrollo de la comarca y la contribución al medio natural.