J. S. VALENCIA Los presupuestos del Ministerior de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno Rajoy son, como habían advertido los portavoces del Ejecutivo, «los más restrictivos de la historia reciente en España» y lo son con una víctima claramente señalada: la gestión del agua y la construcción de infraestructuras para asegurar su suministro. En términos globales, el presupuesto para la Comunitat Valenciana del ministerio que preside Miguel Arias Cañete pasa de 72.465.490 euros a menos de la mitad, con tan solo 32.372.170 euros y muy lejos de las previsiones que tenía el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que cifró en euros la inversión en 2012 en 53.201.930 euros.
Además, el ministerio no quiere esconder sus intenciones para el próximo año 2013, en el que preve inversiones ligeramente inferiores a las del actual, con una previsión de 31.488.900 euros.
El presupuesto ignora la mayoría de los compromisos del Partido Popular mientras fue oposición. No hay ni un solo euro para financiar estudios o programas, menos todavía obras, relacionadas con el trasvase del Ebro. Se quedan fuera de las previsiones del Estado obras emblemáticas y largamente reivindicadas por los gobiernos del PP en Valencia como la presa de Vilamarxant o las actuaciones para la defensa de la Ribera de las avenidas del Júcar (Presas de Sellent , Montesa y Marquesat)
Tampoco hay inversiones previstas dentro del Plan Nacional de Calidad de las Aguas para la Comunitat Valenciana, pese a ser también una de las reivindicaciones contra el anterior gobierno.
El ministerio mantiene no obstante las actuaciones encomendadas a Acuamed para la regeneración del lago de la Albufera.
Paradójicamente solo existe una cierta continuidad en las desaladoras en construcción-el Gobierno, pese a sus críticas, ha decidido terminarlas-quizá para no perder los fondos europeos recibidos.
De hecho, frente a la caída global de las inversiones del ministerio, solo Acuamed, la empresa pública que construye las desaladoras, mantiene en un nivel ligeramente superior al del año pasado sus inversiones en la Comunitat Valenciana, con 131 millones de euros frente a los 128 del pasado año, triplicando con su presupuesto el del propio ministerio, que incluye a su vez el de una devaluada Confederación Hidrográfica del Júcar
La otra gran empresa pública responsable de la modernización del regadío, la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias de la Meseta Sur (Seiasa) mantiene e incluso aumenta sus inversiones en Castelló y Valencia y las recorta en Alicante. En conjunto dedicará a diversas obras de modernización de regadío algo mas de 6,3 millones de euros frente a los 3,1 millones de euros del ejercicio anterior.
Por último, el Fondo de compensación dedicará 5,655 millones de euros a tres actuaciones hídricas entre las que se incluyen las obras del postrasvase Júcar-Vinalopó-Elche, en teoría responsabilidad económica de la Comunitat Valenciana. Los 5,6 millones de euros destinados a estas tres obras son la misma cantidad empleada el año pasado en 22 obras que beneficiaron a otras tantas poblaciones valencianas.