Con un presupuesto de 1,1 millones de euros, lo que supone una baja del 18% sobre el presupuesto máximo de licitación
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), a través de la sociedad estatal Acuamed, ha adjudicado el contrato para la operación y mantenimiento de las infraestructuras de la conducción Júcar-Vanalopó, en Valencia y Alicante, por un importe de 1,1 millones de euros, lo que supone una baja del 18% sobre el presupuesto máximo de licitación.
En este contrato, con un plazo previsto de ejecución de 12 meses, se incluyen las labores de control y seguimiento de las tareas de operación ordinaria, los trabajos de mantenimiento, la conservación y vigilancia de todo el sistema, la ejecución de auditorías técnicas en los equipamientos existentes y la logística de operación (almacenes, stocks, recambios, contratos especializados), entre otras.
La conducción Júcar-Vinalopó es una infraestructura declarada de interés general del Estado impulsada por el Ministerio y cuya ejecución fue encomendada a la sociedad estatal Acuajúcar, ahora absorbida dentro de Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed). Su principal objetivo es facilitar agua en cantidad y calidad suficiente para recuperar los acuíferos sobreexplotados del Vinalopó, permitiendo trasvasar hasta 80 hm3 de agua al año procedente de los sobrantes del curso bajo del río Júcar.
Cuenta con el respaldo de la Comisión Europea, que ha financiado su construcción con 120 millones de euros procedentes de los Fondos de Desarrollo Regional (FEDER). El presupuesto total de la Conducción Júcar-Vinalopó supera los 330 millones de euros.
La conducción tiene una longitud de 95 kilómetros. Incluye dos túneles -Corbera y Barxeta, con más de 6,5 km-, sifones por gravedad e impulsiones con tuberías de 1900 mm y 1800 mm de diámetro, 4 estaciones de bombeo, 3 balsas intermedias de regulación, con un volumen total de 300.000 m3 -Panser, Llanera de Ranes y Moixent-. Estas balsas intermedias facilitan las operaciones de arranque y paro de las estaciones de bombeo y ofrecen flexibilidad a todo el sistema en caso de fallo en el suministro eléctrico en alguna impulsión.
En cola del sistema para la regulación y el almacenamiento de los excedentes impulsados se ha construido una gran balsa, denominada de San Diego, con 20 hm3 de capacidad nominal.
El Ministerio, a través de Acuamed, ha adjudicado este contrato a la UTE integrada por Aquagest Levante, Aqualogy Medio Ambiente y Aqualogy Aqua Ambiente Servicios Integrales.