José Ángel Sáez y José Calderón son dos de los agricultores de Barrax que, en los últimos días, han sufrido robos en sus parcelas agrícolas, un fenómeno que también ha afectado al polígono industrial de la localidad. En todos los casos el «destrozo» es más importante que el valor de lo sustraído, pero los ladrones siguen actuando y ocasionando daños por miles de euros.

Más de 700 aspersores han resultado inutilizados este fin de semana en las explotaciones de José Ángel y José, quienes indicaron que en la zona comprendida entre la carretera de Barrax y La Gineta se ha arrasado, en total, con «más de 3.000» dispositivos de riego para extraer la pieza de latón, de unos 200 gramos, que luego se vende en el mercado negro a un precio de 40 céntimos el kilo.

«A nosotros nos cuesta arreglar cada aspersor entre 10 y 12 euros», afirmaron estos agricultores, quienes lamentaron que solo un día después de poner la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil de Albacete y de La Roda, el pasado lunes, se produjeran nuevos robos en la zona. «Es de risa», señaló José Ángel, quien se mostró convencido de que, por un lado, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado deberían «prestar más atención» a estos delitos «y no tanto a los radares y las multas de tráfico», mientras que por otra parte «habría que actuar contra las chatarrerías que compran el material robado».

En similares términos se pronunció su primo José, quien dijo que el problema «es muy grave» y se debe tanto a la «falta de vigilancia rural» como a la impunidad de quienes adquieren el latón. Este profesional dedicado al cultivo del ajo ha visto cómo en apenas dos meses, la primera vez en octubre y el pasado fin de semana, unos desaprensivos han echado a perder el sistema de riego de la misma parcela. Un sistema que, por cierto, cada vez le resulta más caro utilizar debido a la subida de la energía eléctrica. «Hay que proteger más la actividad agraria», señaló este hijo y nieto de agricultores, quien aseguró que «el campo está abandonado» y que ellos mismos se organizan para «darse una vuelta» por las fincas.

Las organizaciones agrarias llevan tiempo advirtiendo del agravamiento de los robos en el campo sin que por ahora se haya podido contener su incidencia. Pese a la buena disposición, en la provincia, de la Subdelegación del Gobierno, este tipo de delitos se siguen produciendo y a los agricultores apenas les queda otra que hacer público su malestar, ya que ni siquiera los seguros son una solución. «No se hacen cargo porque para eso habría que vallar e incluso instalar cámaras en las explotaciones, algo impensable», indicó José Ángel.

La alcaldesa de Barrax, Josefina Navarrete, afirmó que son conscientes del problema y que el Ayuntamiento «está a disposición de los agricultores». Señaló que el pasado 5 de noviembre mantuvieron una reunión con el subdelegado del Gobierno, Federico Pozuelo, para pedir «más presencia de la Guardia Civil» en la localidad.

En el polígono ‘Rosa del Azafrán’, que según indicó Navarrete está «recién terminado», los ladrones la emprendieron contra los transformadores eléctricos, provocando pérdidas de 25.000 euros, en uno de los robos, y de más de 100.000 en otro. No obstante, la alcaldesa explicó que los autores del suceso más reciente, ocurrido hace algo más de una semana, fueron detenidos en Madrid tras darse a la fuga en un coche que robaron también en el municipio. Se trataba, afirmó, de seis miembros de una banda organizada. Navarrete señaló que la óptima ubicación de Barrax respecto a las comunicaciones por carretera es un factor en contra, «por la facilidad de huida», cuando se producen estos delitos.