J. SIERRA VALENCIA El PSPV está dispuesto a apoyar la reforma del Estatut renunciando a la gestión de los ríos intracomunitarios si con ello garantiza los derechos de los regantes tradicionales del Júcar sobre las aguas de este río, según trasladó ayer el secretario general de los socialistas valencianos Ximo Puig al presidente de la Acequia Real del Júcar y de la Unidad Sindical de Usuarios del Júcar, José Manuel García de la Cuadra, en una reunión celebrada en la sede de la ARJ.
Según fuentes socialistas, el partido ha abierto un proceso interno de debate que podría derivar en una «redefinición» de su política hídrica y en la que puede enmarcarse una reforma del Estatut que en su versión actual y en lo relativo al agua fue pactada por el secretario general socialista Joan Ignasi Pla y el expresidente de la Generalitat Francisco Camps.
Los regantes del Júcar y con ellos la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunitat Valenciana (Fecoreva), han pedido abierta e insistentemente al Consell de la Generalitat que cambie el Estatut renunciando a estas competencias en favor del Estado. De este modo se garantizan, dicen, una gestión unitaria por parte del Estado de toda la cuenca hidrográfica del Júcar «ahora amenazada». El Consell se muestra reacio a esta posibilidad.
El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, aseguró ayer que los valencianos «no vamos a perder nuestra capacidad de decisión sobre el Júcar». En este sentido destacó que «Cospedal está humillando permanentemente a Fabra y a la Comunitat Valenciana, algo que es intolerable, porque el agua de la que estamos hablando no es una cuestión que afecte únicamente a los regantes, sino a todos los valencianos».
«Por este motivo los socialistas no apoyaremos ninguna medida que nos quite capacidad de decisión sobre el Júcar», subrayó.
Puig, acompañado por el secretario de Agricultura y Agua del PSPV-PSOE, Francisco Rodríguez Mulero, añadió que el agua «no puede estar en la agenda política en función de los intereses partidistas del PP». En este sentido, apuntó que «durante mucho años, el agua fue una bandera fundamental de confrontación, una bandera de victimismo que no ha aportado nada positivo para acabar con el verdadero problema, que es tener agua asegurada para todos los ciudadanos y para nuestros sectores productivos para siempre, que es lo que los socialistas hemos pedido siempre».
La diputada de EUPV en las Corts, Esther López Barceló, manifestó ayer que el Real Decreto de Demarcación Hidrográfica del Júcar es una «auténtica chapuza totalmente recurrible». En su opinión, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, es un «irresponsable» por presentar un texto «fruto de la improvisación que incluye argumentaciones que ya les han tumbado los tribunales en ocasiones anteriores».
Según Barceló, el Real Decreto «solo aspira a mantener provisionalmente el status quo actual de la Demarcación del Júcar, sin dar respuesta a los conflictos». En su opinión, el Real Decreto «evita en todo momento discutir la delimitación de la demarcación, y establecer qué ríos son competencia autonómica de Castilla-La Mancha y cuáles del País Valencià» y que «ambos están obligados por la legalidad vigente a asumir sus competencias en sus ríos internos».