El Ministerio de Agricultura defenderá en Bruselas «replantear» las prácticas agrícolas beneficiosas para el clima y el medio ambiente o greening, que consiste en que un 30 por ciento de las primas se conceda a productores que presten determinados servicios al medio ambiente. La secretaria general de Agricultura y Alimentación, Isabel García Tejerina, defendió, por el contrario, que no se apliquen medidas complementarias para recibir esos fondos.
«España entiende que sólo con mantener las plantaciones permanentes ya se producen beneficios en la captación de CO2, en la protección del suelo contra la erosión, en el paisaje y en otros aspectos que justificarían que las superficies de cultivos permanentes cumplieran las condiciones del greening ipso facto, sin medidas complementarias», afirmó.
En una Jornada sobre Hortofruticultura en la PAC 2014 – 2020, García Tejerina defendió el principio de sostenibilidad ambiental de las explotaciones agrarias, subrayando que la configuración del greening debe cumplir, en todo caso, unas condiciones sencillas, que se adapten a la diversidad productiva comunitaria, que no afecten a la viabilidad económica de las explotaciones y que no impliquen mayores cargas administrativas a los Estados miembros.
En 2013, la Unión Europea (UE) debe cerrar un acuerdo sobre las perspectivas financieras para los próximos siete años y de ellas depende la conclusión de la reforma de la PAC. En las últimas negociaciones circularon documentos, como el que presentó la anterior presidencia rotatoria de la UE (Chipre), que planteaban una rebaja de los presupuestos, que afectaría sin duda a la agricultura.
Ante la posibilidad de que el Parlamento Europeo no apruebe esta reforma, España y otros países han solicitado que en 2014 se prorrogue el actual modelo de la PAC. La última noticia al respecto es que la Comisión de Agricultura de la Eurocámara ha planteado que la reforma agraria mantenga el mismo presupuesto que había hasta la fecha. Y además plantea algunas excepciones para el greening en cultivos determinados y explotaciones pequeñas .
En este sentido, Isabel Tejerina subrayó que España está solicitando que se respete la actual dotación presupuestaria en la propuesta inicial de la Comisión, para cuya defensa se quiere hacer un frente común y continuar trabajando con otros Estados miembros.
Tarifa plana.
En cuanto al contenido de la propia reforma, Bruselas propuso ideas como un pago fijo por hectárea o ‘tarifa plana’, diferente al sistema de derechos históricos que rige para las subvenciones en la actualidad.
No obstante, la número dos del Ministerio de Agricultura ha recordado que el Reglamento especifica claramente cuáles son los beneficiarios que podrán solicitar derechos en 2014, pero no establece ninguna referencia ni limitación al número de hectáreas por las que se podrán solicitar los derechos. Por ello explicó que la propuesta española «se basa en limitar el número de hectáreas admisibles mediante el establecimiento de un periodo de referencia anterior».
En relación con la convergencia interna individualizada, señaló que España se ha alineado con otros países para defender un método que consistiría en aproximar los importes individuales del Pago Básico a un valor medio de referencia, de manera similar al mecanismo empleado por la Comisión para la convergencia entre Estados miembros: «Creemos que este modelo de convergencia interna es el que conviene aplicar en España, por la diversidad de su agricultura y porque supone una transición menos abrupta con el modelo de Pago Único histórico que se aplica en la actualidad».