MURCIA. El presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, dio la bienvenida a lo que denominó como un «hilico de agua», al envío de 11 hectómetros cúbicos para riego autorizados el viernes por el Consejo de Ministros, «después de nueve meses y seis trasvases cero». Valcárcel atribuyó a la «presión» ejercida por los regantes la decisión adoptada el viernes, así como «al trabajo y a los informes elaborados por el Sindicato Central del Acueducto Tajo-Segura».
Para el jefe del Ejecutivo murciano, todo ello permitió que, «por fin, hayan podido convencer a la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, de la importancia de la agricultura murciana», informa Ep.
Ni un día más
El desembalse autorizado el viernes es el primero que se produce desde mayo de 2006, y la cantidad autorizada es inferior a la solicitada por los regantes para febrero (60 hectómetros cúbicos).
En este sentido, Valcárcel aseguró que «la agricultura murciana necesita agua urgentemente, y no puede esperar ni un día más, porque cada día que pasa se secan los árboles, se pierden cosechas y se sobreexplotan, aún más, los acuíferos subterráneos». Una situación que calificó de «dañina para el medio ambiente».
El jefe del Ejecutivo murciano pidió «soluciones concretas ante la escasez de recursos y aportaciones de agua», porque explicó que «la cuenca del Segura sufre un déficit hídrico estructural que sólo se soluciona con aportaciones externas».
A su vez, Valcárcel recordó las palabras del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el último debate sobre el Estado de la Nación, de mayo de 2006, en las que aseguró que «en siete meses acabaría con los problemas de la sequía para siempre», y se preguntó si «la solución era el hilico aprobado el viernes y retrasado un mes por motivos puramente políticos».
El presidente murciano recordó «los años dorados» del trasvase Tajo-Segura, en referencia a la década 1995-2005, cuando recibía una media de 350 hectómetros cúbicos, frente a los 20 hectómetros que se recibieron en todo el año pasado, «a un precio mucho más caro». Valcárcel pidió al Gobierno de Zapatero «mayor contundencia a la hora de defender el trasvase».