La presidenta regional del PP y secretaria general de la formación, María Dolores de Cospedal, considera que es «absolutamente indispensable» un pacto o un plan hidrológico del agua, y ha destacado que ha sido el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero «el que dio al traste» con el Plan Hidrológico Nacional (PHN).

   Cospedal ha respondido así, a preguntas de los medios en las Cortes, por la posibilidad de que en la reunión que mantendrá esta tarde la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, con el presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, se aborde ese pacto hídrico.

   La responsable ‘popular’ ha indicado que en su partido siguen defendiendo «la necesidad y siempre la oportunidad» de alcanzar un pacto como ese, pero ha destacado que el problema actual es «que aunque ahora la ministra está diciendo esto, ha sido su Gobierno el que dio al traste con el PHN», siendo el PP el que «creó un PHN en este país».

   De otro lado, preguntada por el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en el que se expresa, al hablar del agua en España, que los trasvases como estrategia de uso intensivo de los recursos hídricos «está agotada», ha señalado que no conoce «esa parte» del informe.

El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, ha asegurado que le «extrañaría mucho» que el presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, acuda al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) ha hablar del Tajo, siendo este un río que «no pasa por Murcia».

   A preguntas de los medios por la reunión que esta tarde Valcárcel mantendrá con la titular del MARM, Rosa Aguilar, Sánchez Pingarrón ha considerado que el Ministerio hace «papeles» como el esquema de temas importantes del Plan Hidrológico del Tajo, «y eso debe ser lo que la ministra utilizará de argumentario» en el encuentro.

   «Me extrañaría mucho que el presidente de Murcia fuera a hablar del Tajo a Madrid» ya que, según el consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, «lo que debe es plantear los asuntos del Segura, el Tajo no pasa por Murcia».

   De otro lado, en declaraciones a los medios en las Cortes, el consejero ha valorado un informe que ha publicado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en el que se expresa, al hablar del agua en España, que los trasvases como estrategia de uso intensivo de los recursos hídricos «está agotada» y «no es la solución».

   Además, este organismo «aboga por un uso eficiente de los recursos hídricos y el agua» que «coincide» con la visión que tiene Castilla-La Mancha sobre este política, que también es coincidente con la que tiene la Unión Europea, a través de la Directiva Marco del Agua.

DISTANCIA NEUTRAL

   El informe de la OCDE «viene a confirmar que la dirección de la política del agua de Barreda es la adecuada y lo avalan organismos internacionales», ha rematado, destacando del mismo la visión «de distancia neutral» que aporta respecto a las «polémicas del agua que se producen en España».

   «En Castilla-La Mancha tenemos razón cuando defendemos que el agua del Tajo debe ser prioritariamente para los usos de la propia cuenca y que debe hacerse un uso eficiente de los recursos hídricos», lo que «pone en cuestión» la utilización del agua trasvasada que se hace en el Levante.

   El consejero ha destacado que actualmente está en tramitación el Plan Hidrológico de la cuenca del Tajo, y que hace un mes se aprobó el esquema provisional de temas importantes que, si bien no contiene todas las aspiraciones de la región, sí «supone un avance importante» en aspectos como la necesaria reserva estratégica en los pantanos de cabecera o la modificación de normas de explotación del trasvase.

La Unidad Sindical de Usuarios del Júcar (USUJ) ha mostrado este lunes su oposición al anteproyecto de Ley del Agua que está elaborando Castilla-La Mancha ya que considera que tras el «intento frustrado» de incluir una reserva hídrica en la reforma del Estatuto, la normativa «insiste» en plasmar una de 4.000 hectómetros que «pone en peligro todos los usos del agua del Júcar en Valencia, tanto los de riego como los del abastecimiento de Valencia y su área metropolitana».

   Asimismo, ha apuntado en un comunicado que esta cantidad «duplica la que Castilla-La Mancha está utilizando en este momento» y ha añadido que en un año hidrológico «excepcionalmente húmedo como el actual, la comunidad no ha llegado a disponer de esa cantidad almacenada».

   «Uno de los principios de nuestra Constitución es que el agua es competencia del Estado y en USUJ entendemos que debe seguir siéndolo. Unilateralmente, una comunidad autónoma no puede ni debe regular con una ley competencias exclusivas del Estado que deben acordarse entre todas las comunidades autónomas y usuarios y regularse en el marco del Plan Hidrológico del Júcar que es competencia del Estado», ha afirmado Juan Valero de Palma, secretario general de USUJ.

   Igualmente, ha considerado que el proyecto de ley «pretende introducir normas de explotación, en el ámbito del río Júcar, que garanticen que el abastecimiento de Albacete es prioritario evitando compensaciones económicas». «Con ello, se hace alusión directa al Convenio de Alarcón firmado en 2001 entre USUJ y el Ministerio de Medio Ambiente que reconocía la propiedad del embalse de Alarcón a USUJ y que establecía una curva de reserva de agua para sus integrantes», ha recalcado.

   En este sentido, Juan Valero de Palma ha señalado que Albacete «como todos los abastecimientos urbanos, tienen prioridad absoluta sobre el resto de usos. Esto está reconocido en el Plan Hidrológico del Júcar y, por supuesto, en USUJ lo respetamos plenamente».

    La entidad ha incidido en que la nueva ley «incumple claramente el Convenio de Alarcón y manipula su esencia». «La deuda pendiente del Ayuntamiento de Albacete con USUJ no es por el uso del agua sino por los gastos que origina para los regantes la extracción de aguas de los pozos en los períodos en el que el embalse no alcance las reservas establecidas por el convenio», ha afirmado, y ha añadido que es necesario tener en cuenta «que no es únicamente el Ayuntamiento de Albacete el que utiliza las aguas de Alarcón y el resto de usuarios han pagado su coste».

CCOO de Castilla-La Mancha ha considerado que el anteproyecto de Ley de Agua propuesta por el Gobierno de la región es «una apuesta atrevida», y ha expresado su «disposición y su compromiso» para que se puedan conseguir los objetivos que se proponen, algo para lo que reclama debate social y consenso político.

   En nota de prensa el sindicato, ha asegurado que este anteproyecto es una iniciativa «importante y novedosa que debe tener cómo orientación la consecución de un adecuado desarrollo regional sostenible. Una alternativa posible y razonada para evitar usos irracionales, insostenibles y para ordenar la regulación y gestión del agua teniendo en cuenta los intereses de la Comunidad Autónoma».

   «Es una aportación e interesante para la ordenación jurídica en materia de la gestión del agua en el estado de las Autonomías», que generará y alentará un debate social y político en torno a las políticas del agua y los niveles competenciales sobre derechos y gestión de los recursos hídricos, han asegurado desde este sindicato.

   El sindicato estima que la oportunidad de insistir en las necesidades hídricas de la región, desde el «consenso y la razonabilidad, es una buena fórmula para que concite  el mayor concurso social y político y un apoyo masivo de la ciudadanía».

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha coincidido con la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, en que la no aprobación del Estatuto de Castilla-La Mancha ha sido «una oportunidad» perdida para la región que, a través de ese documento, habría podido solucionar sus problemas de agua.

   Barreda, que ha inaugurado este sábado el tercer Foro Regional de Periodistas de Castilla-La Mancha que se celebra en Ciudad Real, ha señalado, a preguntas de los medios, que «si el Estatuto se hubiera aprobado en el Congreso con el apoyo del PP se habría zanjado el problema del agua».

   En este sentido, ha lamentado que en otras Comunidades Autónomas sí hayan sido capaces de alcanzar acuerdos Gobierno y oposición, como en Valencia o Murcia, sin que el agua se utilizara como «arma arrojadiza. Pero aquí, en Castilla-La Mancha, el PP regional nos hizo a última hora la pirula, como se dice vulgarmente, cuando llegó el señor Valcárcel al Congreso y dejó claro que en materia de agua en el PP manda él».

PLANIFICACIÓN HIDROLÓGICA

   Durante su intervención, el máximo responsable del Ejecutivo castellano-manchego ha recordado la importancia que la planificación hidrológica tiene en Castilla-La Mancha, un territorio al que le afectan siete cuencas, «y si nos hubiéramos puesto de acuerdo en la prioridad de la cuenca cedente, hubiéramos dado un paso adelante muy importante».

   En este sentido, Barreda ha explicado que, «lamentablemente», Castilla-La Mancha no forma parte de la España húmeda, sino de la seca «por lo que no nos sobra el agua para todo tipo de usos y hay que marcar las preferencias. Yo estoy de acuerdo, y siempre lo hemos demostrado, en que los ríos son de todos los españoles, pero también de los castellano-manchegos y debemos tener preferencia», ha concluido.

El vicepresidente tercero del Consell y conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, Juan Cotino, ha asegurado este sábado que «se ha demostrado que el Plan Agua es un fracaso absoluto de la nefasta política hídrica del Gobierno» central, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

   Así, Cotino ha indicado que «la primera vez que se ha podido votar este Plan –en referencia al Consejo del Agua del Segura– se ha evidenciado que es un proyecto que no gusta a nadie, excepto al propio Gobierno».

   El responsable autonómico ha indicado que el proyecto que presentó la ex ministra de Medio Ambiente Cristina Narbona «como alternativa a la derogación del trasvase del Ebro para solucionar los problemas hídricos que padece la Comunitat Valenciana fue y sigue siendo una auténtica barbaridad totalmente ineficaz, ya que las desaladoras tienen un elevado coste energético y medioambiental y resultan inviables económicamente».

   La «única solución» a la situación de déficit hídrico de la Comunitat Valenciana es que «cambie el Gobierno y se recupere el Plan Hidrológico Nacional (PHN) que el año 2001 fue aprobado con el respaldo de todos», ha manifestado el conseller, que ha añadido que «de esta manera se acabaría con las situaciones que se están produciendo en esta materia y que son consecuencia de la inexistente política hídrica que caracteriza el gobierno socialista».

   Juan Cotino ha realizado estas declaraciones en unas jornadas de liderazgo dirigidas a jóvenes de las comarca de la Marina y la Safor que se han celebrado en la localidad de Xàbia (Alicante). En este encuentro ha explicado las últimas reivindicaciones del Gobierno valenciano en materia hídrica.

   El vicepresidente ha recordado que el pasado jueves se reunió el Consejo del Agua del Segura para debatir el Esquema de Temas Importantes (ETI), documento previo al Plan de Cuenca, y en el que se pretendía cubrir el 40 por ciento déficit hídrico que padece esta cuenca con agua desalada. «Esta propuesta recibió un rechazo total de prácticamente todos los usuarios y de todas las comunidades autónomas representadas. De hecho, el único voto positivo que tuvo fue el de un representante del Gobierno central», ha asegurado.

   «Lo que evidencia que la alternativa propuesta por el Gobierno de Zapatero al PHN se ha mostrado totalmente inútil y lo que debería hacer es recuperar el trasvase del Ebro como siempre hemos defendido desde la Generalitat», ha comentado.

   Cotino ha explicado en las jornadas que «el rechazo mostrado por todos los miembros del Consejo del Agua, así como la opinión de la Federación de Regantes de la Comunitat han motivado que el pleno del Consell solicite al Gobierno central que modifique los Presupuestos Generales del Estado para que prioricen las obras de modernización de regadío, reutilización y prevención de inundaciones, frente a la construcción de desaladoras».

   Los Presupuestos Generales del Estado para 2011 incluyen la construcción de desaladoras como eje básico de las inversiones en materia de agua para la Comunitat Valenciana, ha precisado el conseller, que ha indicado que «como ha quedado demostrado es un método que nadie respalda en nuestro territorio».

   «Además, en estos momentos de crisis económica resulta más rentable para la agricultura valenciana dirigir las inversiones a crear obras destinadas al ahorro y la eficiencia hídrica que invertir en la construcción de desaladoras que, además del elevado coste energético y medioambiental, resultan inviables económicamente, ya que el agricultor es incapaz de asumir el coste de producción de agua desalada si quiere que su explotación tenga futuro», ha asegurado.

   Juan Cotino ha señalado que «la realidad es que el ministerio, forzado por criterios políticos, no ha realizado ningún análisis riguroso de viabilidad técnico-económica de las actuaciones previstas en el programa AGUA, algo de lo que hemos estando advirtiendo desde hace seis años cuando se derogó el trasvase del Ebro».

AUTORIDAD HÍDRICA NACIONAL

   Por otro lado, el vicepresidente ha insistido en la necesidad de que exista una Autoridad Hídrica Nacional que coordine todas estas materias. De este modo, ha precisado, se evitarían situaciones como las que se han producido en los últimos días, en relación a los borradores de los planes de cuenca del Tajo y del Segura.

   En este sentido, Cotino ha explicado que en los diferentes planes de Cuenca del Tajo y del Segura elaborados por las respectivas confederaciones se han constatado la incompatibilidad entre las medidas propuestas, «lo que evidencia la falta de coordinación existente entre dos organismos, la CHS y la CHT dependientes del Ministerio de Medio Ambiente».

   «Por todo ello, vamos a instar al ministerio a que adopte las medidas necesarias que garanticen la coordinación entre los planes que están elaborando las distintas demarcaciones», ha asegurado el vicepresidente tercero y conseller de Medio Ambiente.

El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, ha destacado en Cuenca, que el Gobierno regional está consiguiendo materializar sus reivindicaciones en materia hídrica en la cuenca del Tajo.

   A preguntas de los medios, sobre el borrador del Plan Hidrológico del Tajo, el consejero ha afirmado que están logrando que «el Tajo se planifique teniendo en consideración las necesidades que tiene el propio Tajo, cuidando el río para su propia cuenca.

   Asimismo, ha considerado que el rechazo que ha suscitado el documento en el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo Segura (Scrats) indica que el ejecutivo regional está consiguiendo las «justas reivindicaciones» que siempre ha mantenido respecto al Tajo.

   En definitiva, ha dicho, «lo que queremos es que el río Tajo no sea para Castilla la Mancha, sea para todos los pueblos, ciudades y Comunidades Autónomas que están en la cuenca».

   Por último, ha criticado que la presidenta del PP de Castilla-La Mancha y secretaria general de la formación, María Dolores de Cospedal, no apoye las reivindicaciones hídricas del Gobierno regional.

El presidente del Ejecutivo regional, José María Barreda, ha asegurado que cuando Castilla-La Mancha exige que se cumpla la prioridad de la cuenca cedente en materia de agua, «eso no es agredir a nadie, eso es sencillamente defender la ley y el sentido común» y desde luego, ha añadido, «eso lo vamos a mantener pase lo que pase y en todas las circunstancias».

   De este modo, ha asegurado que defenderá con firmeza los derechos que Castilla-La Mancha tiene en materia de agua, con el mismo espíritu de lucha con el que Anchuras (Ciudad Real) defendió hace años su territorio para impedir que allí se construyera un campo de tiro militar.

   Barreda, que ha estado en la localidad, ha hecho referencia a las declaraciones del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), que ha expresado su rechazo al Esquema de Temas Importantes (ETI) del Plan Hidrológico del Tajo, aprobado en la Confederación Hidrográfica de dicha cuenca.

   «De forma muy tranquila y completamente en paz quiero decir que vamos a defender los derechos que Castilla-La Mancha tiene cuenca a cuenca, río a río, ahora que se están negociando los planes de cuenca del Tajo, del Segura, y del Júcar», ha manifestado.

   De este modo, ha querido hacer saber a todo el mundo que va a defender de manera eficaz los intereses de los castellano-manchegos e insistió en que «cuando defendemos Castilla-La Mancha no agredimos a nadie».

El Gobierno de Castilla-La Mancha, por boca de su portavoz, Isabel Rodríguez, ha dicho al Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats) que no quiere «guerras por el agua» y la pedido «tranquilidad» y «respeto» hacia los castellano-manchegos porque no están «contra murcianos ni valencianos».

   Rodríguez ha respondido así al ser preguntada por las declaraciones hechas este martes por dicho sindicato en las que advertía de que pondrán a todo el sureste «en pie de guerra» si se aprueba el Esquema de Temas Importantes (ETI) del Plan Hidrológico del Tajo en los términos en los que está planteado.

   «No queremos guerras por el agua, nosotros no estamos en guerra, nosotros estamos reivindicando de manera pacífica y serena lo que creemos que es de justicia histórica con nuestro territorio», ha aseverado Rodríguez, que ha recalcado que Castilla-La Mancha está siguiendo los cauces legales y normativos para evidenciar que la región necesita el agua para su desarrollo y para beber.

   Por ello, ha proseguido, «hemos emprendido una serie de acciones desde el ámbito de la política, judicial y legislativo para conseguirlo». «Si eso en Murcia y Valencia lo llaman guerra, pues estaremos en guerra, pero nosotros estamos defendiendo los intereses de Castilla-La Mancha, y lo estamos haciendo bien, de manera ordenada, siguiendo cada uno de los cauces, y eso es lo que provoca la reacción en la región de Murcia y Valencia», ha declarado.

El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha asegurado que «la estrategia exagerada de intentar hacer campaña política con el agua desde Murcia y Valencia», así como «el descaro con el que hablan de casi secar el río», en referencia al Tajo, es una «falta de respeto a la sensibilidad de un país moderno y de las generaciones que necesitan tener un río limpio».

   «Francamente creo que en Murcia y Valencia, la inmensa mayoría de la gente tiene claro que no se puede expoliar ni el Tajo, ni ninguno que los ríos, que son lo que Dios quiso que fueran, ríos, y en el caso del Tajo además que desemboque en el Atlántico y no en el Mediterráneo», ha señalado a preguntas de los medios, tras presentar el proyecto de restauración de la bóveda de la Iglesia del Convento de Santo Domingo El Real.

   Es por ello que ha dicho que es «una falta de respeto a las normas más elementales de sostenibilidad ambiental» que alguien con responsabilidad pueda decir poco más o menos que le da igual que un río este limpio o no. «Seguramente quien lo haya dicho en Murcia y Valencia son conocidos del primo del señor Rajoy, que ya saben qué piensa sobre el cambio climático y el medio ambiente», ha comentado.

   «Creo que es un tema muy serio para que año tras año tengamos que soportar aquí, no solo que se quieran beber nuestro agua, sino malusarla. Es simple y llanamente intolerable», ha insistido.

   Según ha indicado el primer edil capitalino, el tema del agua es un asunto que «sobrepasa a España», porque la normativa a aplicar es europea que fija que en 2015 los ríos tienen que tener «un amplísimo caudal ecológico». «No será nunca como lo dio la naturaleza, pero sí lo suficiente para que se pueda considerar río», ha puntualizado.

   «Lo demás son simples intentos de seguir convirtiendo cada metro cúbico de agua en votos, que es lo que quieren hacer, contabilizan los votos en metros cúbicos, y a estas alturas de curso no nos sorprende a nadie», ha condenado García-Page.

   Así la cosas, ha defendido que «si pudiéramos mantener un debate, aquí en Safont, al lado del Tajo, no podrían decir ese tipo de barbaridades porque clama al cielo».

   Dicho esto, el alcalde de Toledo ha redundado en el hecho de que

los ríos en España se diferencian por la cuenca en la que desembocan,  en la atlántica o en la mediterránea.  «Si usted lo pone en el mapa, algún bobo podría pensar que los que desembocan en una son de izquierdas y en la otra, de derechas. Pero no hay nadie con dos dedos de frente que se le pase por la cabeza».

   El alcalde ha defendido que «el Tajo no es de izquierda, ni de derechas, y el debate para mantener el río limpio y para que tenga caudal no es del PSOE ni del PP».

   «Entiendo que los socialistas de Murcia y Valencia quieran agua del trasvase, porque es muy complicado deshacer una tendencia de expolio del agua desde hace muchos años, pero también sería entendible que en Castilla-La Mancha miráramos este asunto como un criterio territorial, no ideológico».

   A juicio del alcalde de Toledo, y a modo de conclusión, «el problema es que algunos o algunas anteponen sus intereses de partido y sus responsabilidades políticas a los de los ciudadanos que dicen representar. A estas alturas está claro todo, excepto el agua del río».