Cotino denuncia el doble discurso del Gobierno de Zapatero con el trasvase del Ebro
El vicepresidente tercero y conseller de Medio Ambiente, Juan Cotino y el alcalde de Castellón, Alberto Fabra han inaugurado, la exposición «Transvasament de l’Ebre: Govern de la II República» y han presentado el libro homónimo, en el que se recogen documentos originales de 1937 que establecen la necesidad de realizar un trasvase de agua del Ebro a la Comunitat Valenciana y Murcia.
En el transcurso de la inauguración tanto Cotino como Fabra han denunciado la discriminación que sufre la Comunitat Valenciana en materia hídrica. Para el vicepresidente «el Gobierno de Zapatero está evidenciando un doble discurso que perjudica notablemente los intereses valencianos».
«En la actualidad -ha recordado Cotino- el Ebro tiene 10 trasvases, pero ninguno a la Comunitat. En uno de ellos el agua llega a unos municipios de Cataluña que se encuentran exactamente a la misma distancia que la ciudad de Castellón, 127 kilómetros».
«O sin ir más lejos -ha continuado el Vicepresidente- a principios de este mes se produjo el trasvase desde el Ebro de 475 litros por segundo para abastecer la capital cántabra y mientras la Comunitat Valenciana continúa sin percibir ni una sola gota, a pesar de formar parte de la cuenca».
Cotino ha insistido que desde la Generalitat «estamos a favor de la transferencia de agua entre cuencas excedentarias a las deficitarias, lo único que queremos es que la Comunitat Valenciana, un ejemplo en gestión hídrica, reciba, también, el mismo trato que otros territorios».
«A pesar de todos nuestros esfuerzos, de la inversión en sistemas y en infraestructuras de ahorro y gestión de la misma, la Comunitat Valenciana, sigue arrastrando un déficit hídrico histórico y necesitamos la transferencia de aguas desde el Ebro, algo que ya se evidenció como necesario en la II República Española, tal y como lo demuestra la exposición hoy se ha inaugurado», ha destacado Juan Cotino.
El trasvase del Ebro, una necesidad histórica
«Gracias a los documentos recopilados en esta exposición -ha continuado- se demuestra que el trasvase del Ebro a la Comunitat Valenciana y a Murcia y Almería es una necesidad histórica, real, no un capricho del Partido Popular, una necesidad que no entiende de Gobiernos ni de izquierdas ni de derechas. Desde la II República, pasando por el Gobierno de Felipe González que diseñó un Plan Hidrológico y el Gobierno de Aznar, todos han contemplado la importancia y la necesidad de realizar trasvases de agua entre cuencas. Todos excepto el Gobierno de Zapatero».
Así se pone de manifiesto que se podía disponer perfectamente de parte del agua que el Ebro vertía al mar y llevarla al Levante español sin que esto supusiera un excesivo coste acorde con el inmediato rendimiento que el agua trasvasada generaría no sólo en Valencia y Murcia, sino también en el conjunto de España. Por ese motivo, reivindicamos permanentemente la recuperación del trasvase del Ebro.
Un alto cargo de la II República española, Félix de los Ríos, establecía que era necesario un trasvase de agua del Ebro a la Comunitat y lo consideraba una obra de interés nacional. «Como vemos -ha continuado Cotino- la realidad hidrográfica no es nueva, llevamos ya muchas décadas con escasez de agua en nuestra Comunitat y necesitamos los trasvases para sobrevivir y los reclamamos porque el agua es de todos los españoles».
Minucioso informe del trasvase del Ebro en la exposición
Los documentos, adquiridos por la Fundación Agua y Progreso y autentificados mediante pruebas caligráficas, son originales de 1937 y contienen un minucioso informe sobre el Trasvase del Ebro, titulado ‘Aprovechamiento de parte de las aguas sobrantes del Ebro en ampliar y mejorar los riegos de Levante’. El informe es obra del ingeniero de Caminos Félix de los Ríos, uno de los más reputados y prestigiosos expertos españoles en materia hidráulica de la época.
El alto cargo del Gobierno republicano realizó un plano detallado con la planificación del Trasvase del Ebro desde Cherta, en Tortosa, hasta la Región de Murcia (pasando por Castellón, Valencia y Alicante) y que se puede observar en la muestra que se ha presentado hoy. Además, podrá contemplarse el informe de Félix de los Ríos que se detalla los caudales sobrantes del Ebro que deberían destinarse a mejorar los riegos del Levante peninsular, con el fin de aumentar el agua disponible para regadío.
Forma parte de la muestra la carta que el entonces delegado del Gobierno de Servicios Hidráulicos de la Cuenca del Segura, Luis López Ambid, dirigió en 1937 al ministro de Obras Públicas de la II República, Bernardo Giner de los Ríos. En la misiva, solicita el Trasvase del Ebro al Levante español, basándose en el informe de Félix de los Ríos, ante el «agotamiento total de los caudales disponibles para riego de la cuenca del Segura y sus afluentes».