Rajoy se niega, de nuevo, a mencionar en Valencia el trasvase del Ebro
Mariano Rajoy y Francisco Camps han dejado bien patente la distancia existente entre ambos. El candidato conservador a la presidencia de La Moncloa ha dejado constancia de que da por «enterrado» la reivindicación del Partido Popular Valencianao de ejecutar el trasvase del Ebro. En su intervención Rajoy no ha mencionado en ningún momento las palabras «trasvase del Ebro», es más, únicamente se ha limitado a asegurar que «habrá agua».
Esa ha sido su lacónica expresión a lo largo de su intervención. Rajoy, que se ha mostrado sereno y tranquilio a lo largo de su intervención, en ningún momento ha realizado una mención directa respecto a la política del agua del Partido Popular, obveiando explicar si hará o no el trasvase. Es más, en esta ocasión, a diferencia de lo que afirmó en Alicante, el dirigente conservador ni ha expresado su voluntad de realizar transferencias de agua del Ebro, ni tampco se ha referido a su expresión «los sobrantes del Ebro», ni como era de esperar tampco ha mencionado el Pacto del Agua.
Rajoy, en su habitual ambigüedad política, ha dejado patente que la Comunidad Valenciana queda a la cola en las inversiones que su hipotético gobierno realizará en infraestructuras hídricas en caso de ganar las elecciones el próximo 9-M. Tanto es así, que Rajoy, ni se ha molestado en comprometerse, o al menos en anunciar, la cantidad de hectómetris cúbicos de agua que destinará a la Comunidad Valenciana; ni cuándo tiene previsto iniciar las obras para transferir «los sobrantes» del Ebro, ni tampoco cuanta inversión destinará a Alicante, Castellón y Valencia para traer el agua a Valencia, si acaso la trae.
Mariano Rajoy ha evitado comproimeterse en lo más mínimo sobre esta cuestión. Su negativa a hacerlo ha dejado, nuevamente, en el disparadero al presidente del PP, Francisco Camps, que ha visto como en su ciudad, ante sus comapñeros de partido y ante los miles de militantes y simpatizantes del PPCV, Rajoy a evitado respaldar su discurso. Esa situación evidencia la tensión y el distanciamiento entre ambos, Mariano rajoy y Francisco Camps.