El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, mantuvo ayer una reunión con los titulares de las nueve Confederaciones Hidrográficas para «coordinar» la nueva planificación hidrológica nacional, en el primer encuentro «celebrado desde la toma de posesión de los responsables de las demarcaciones hidrográficas», según hizo público el ministerio. Entre los convocados se encontraba María Ángeles Ureña, presidenta, presunta, de la Confederación Hidrográfica del Júcar, pero cuyo nombramiento no se ha hecho oficial todavía y no ha tomado formalmente posesión de su cargo.
Según explicó el ministerio, a nueva planificación hidrológica del Ministerio persigue el objetivo de lograr «una gestión unificada y coordinada del agua, con la prioridad de garantizar su suministro en cantidad y calidad suficiente en todo el territorio nacional».
Asimismo, Ramos les hizo partícipes de que la nueva estructura de gestión y decisión entre la Dirección del Agua y las Confederaciones Hidrográficas, «más coordinada, redundará en una agilización de los planes de cuenca, cuya conclusión está prevista para 2013».
La exministra de Medio Ambiente, valoró ayer el objetivo del Gobierno de lograr un gran pacto sobre el agua. «Si es difícil conseguir un pacto en cada una de las cuencas, no digamos a nivel nacional», aseguró
«2Ahí tenemos un problema complicado», que es que los estatutos de autonomía reconocen competencias en la gestión del agua en cuencas que van por más de una comunidad. Eso -a su juicio-hará más complejo que en el pasado llegar al consenso necesario para que se aprueben planes de cuenca que tengan más de una Comunidad Autónoma en su territorio.