La nueva campaña de publicidad promovida por el Gobierno murciano para reclamar el Trasvase del Ebro resulta más estilosa y menos tendenciosa que la anterior, en la que un niño ponía en duda la eficacia de las desalinizadoras. En esta ocasión, la campaña de Agua para Todos muestra un vídeo en el que aparece una niña tocando el vals de El Danubio Azul, utilizando como instrumento musical cinco vasos con los nombres de los ríos Ebro, Tajo, Duero, Miño y Segura. Todos contienen un determinado volumen de agua, menos el recipiente del Segura, que está vacío.
La niña saca las notas golpeando los vasos, pero desafina cuando toca el del Segura. A continuación, vierte un poco de agua del Ebro y El Danubio Azul suena a la perfección. «Las soluciones justas son siempre las más solidarias», reza el eslogan final de este vídeo promovido por la Consejería de Presidencia.
En el anuncio precursor, un niño aseguraba a su padre que el agua desalinizada no sirve para regar ni para beber, y que había que juntarla con el agua de río para poder consumirla. El niño se preguntaba por qué el agua del río iba a mar, y después se extraía para quitarle una sal que era depositada de nuevo en el mar.
El Gobierno de Ramón Luis Valcárcel sigue apostando fuerte por el Trasvase del Ebro, en paralelo con su homólogo valenciano Francisco Camps, que promueve otro anuncio en el que se critica las desalinizadoras con el procedimiento de sacar agua del mar -alimentado por los ríos- y donde se vuelve a verter la sal.
El PSOE ha criticado en varias ocasiones el uso de fondos públicos para costear la campaña Agua para Todos por parte del Gobierno murciano, por entender que guarda una finalidad política queno refleja el parecer de todos los ciudadanos de la Región.