La vicepresidenta y consejera de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo, aseguró hoy en el último Pleno del año de las Cortes de Castilla-La Mancha que el Gobierno regional congelará los impuestos para el próximo ejercicio, tal y como anunciara el presidente Barreda al comienzo de esta legislatura, y abordará desde el presupuesto de gastos, que no de ingresos, las políticas sociales.

Araújo enmarcó la aprobación de esta ley dentro del nuevo sistema de financiación autonómica que amplía las competencias normativas de las Comunidades Autónomas en los tributos que son objeto de cesión parcial, y en el caso del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas se otorga un mayor margen para la aprobación de la escala autonómica y para el establecimiento de deducciones de la cuota.

En este sentido, señaló que el Gobierno regional aborda en esta ley la aprobación de la escala autonómica aplicable en el impuesto sobre el IRPF para el periodo impositivo 2011 e introduce una disposición legal que permite el mantenimiento de deducción autonómica relativa a la adquisición de vivienda habitual, a pesar de la profunda modificación que esta deducción ha experimentado en el ámbito estatal por decisión del Gobierno central.

Por eso, mediante una disposición adicional se precisa que los límites, requisitos y circunstancias que habrán de tenerse en cuenta para la aplicación de la deducción autonómica por inversión en vivienda habitual, serán los establecidos en la Ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, con vigencia desde el 1 de enero de este año.

En este sentido Araújo señaló que para simplificar su aplicación en el futuro, la Ley de Presupuestos Generales de la Junta podrá modificar la escala aprobada en la Ley.

La vicepresidenta insistió en que con esta ley se congela uno de los impuestos más importantes en el ámbito de nuestra Comunidad y, junto a ello, se mantiene una deducción importante para los contribuyentes castellano-manchegos que afectan al propio IRPF, a los Impuestos de Sucesiones y Donaciones y a los Impuestos de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados.

De este modo, en relación al IRPF en 2011 se mantienen los beneficios ya existentes en 2007, por nacimiento de hijos, por discapacidad del contribuyente y de ascendientes y descendientes, para contribuyentes mayores de 75 años; por cuidado de ascendientes mayores de dicha edad y por aportaciones al Fondo Castellano-Manchego de Cooperación.

En el Impuesto de Sucesiones y Donaciones se mantienen las bonificaciones del 95 por 100 para todas las transmisiones que se realicen entre cónyuges, hijos y padres; es decir, a favor de las personas incluidas en los grupos I y II de parentesco.

Por su parte, en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados se mantiene la deducción del 100% para explotaciones agrarias prioritarias, el 50% para explotaciones agrarias singulares y del 10% para preferentes. El límite para la aplicación de los tipos reducidos sigue fijado en hasta 180.000 euros y también se podrán aplicar estos tipos a las promesas u opciones de compra que se incorporen a los contratos de arrendamiento por parte de jóvenes (menores de 36 años).

Además, se mantiene la bonificación del 99% para las operaciones que realicen las comunidades de regantes y para garantías formalizadas por sociedades de garantía recíproca con domicilio social en Castilla-La Mancha.

El conjunto total de las medidas tributarias, explicó Araújo, van a significar un ahorro fiscal el próximo año de 190 millones de euros para familias, empresas y agricultores de la región y el número de declaraciones afectadas superará las 275.000.

Política social

La vicepresidenta reiteró en el debate fiscal que la prioridad de este Gobierno son los servicios esenciales y, más en concreto, los servicios sociales. Por eso desde el 2007 ha habido un incremento de hasta el 35,5% en esta área, pasando de los 642,6 millones de euros de ese año a los 871 que se dedicarán en 2011.

Esta prioridad, dijo, se realiza desde el presupuesto de gastos y no desde el de ingresos “porque sólo desde el presupuesto de gastos se llega realmente a todos los que requieren del apoyo público y desde decisiones tributarias sólo se llega a aquellos que tienen una determinada capacidad económica que les obliga a liquidar impuestos”.

Somos la Comunidad Autónoma que más porcentaje en relación a su PIB dedica a la atención a personas mayores, la comunidad que mejor calificación tiene en la aplicación de la Ley de Dependencia, la que dispone de mejor ratio de plazas públicas en residencias y la segunda con mejor cobertura social y más plazas en viviendas de mayores.

La vicepresidenta recordó además que desde que José María Barreda¹ es presidente, el presupuesto dedicado a Sanidad, Educación y Servicios Sociales ha crecido un 78%, a diferencia del Gobierno del PP², durante el cual se incrementaron los impuestos, subió la presión fiscal, aumentaron las tasas y los impuestos especiales y mermaron los beneficios sociales.

“No son el partido de la rebaja de los impuestos ni el partido que favorece la igualdad. Comprobarán -explicó Araújo en el hemiciclo- que el catálogo de deducciones fiscales de Castilla-La Mancha se traduce en un mayor ahorro que en otras comunidades autónomas, beneficia a más contribuyentes y a quienes más lo necesitan”, según figura en los datos de la Agencia Tributaria³.

Pero además, señaló Araújo, en Castilla-La Mancha, de cada cien mil declarantes se benefician 113 castellano-manchegos, frente a los 33 de Madrid o los 45 de Valencia. “En definitiva, se ahorra más y se beneficia más gente”.

“Nuestra política fiscal está separada por un abismo de la del PP, porque no hacemos política fiscal de escaparate. Nuestras leyes permiten que la gente ahorre de verdad, se beneficie a un buen número de contribuyentes y vaya destinado a quines más lo necesitan”, apostilló la vicepresidenta.