El concejal de Medio Natural, Pascual Blanco, ha señalado que la Junta Local de Gobierno del consistorio almanseño, se ha planteado la posibilidad de ceder la propiedad y gestión del pantano a la Confederación Hidrográfica del Júcar, como consecuencia del coste económico que supondría el posterior mantenimiento.
Ha concretado que se trata de una cuestión que se debe matizar y valorar en la mesa de seguimiento de la limpieza de la presa, que todavía no se ha reunido, a pesar de las diversas peticiones del edil de Medio Natural.
Turismo
El proyecto integral de turismo que se pretende impulsar seguiría adelante, y la Confederación asumiría el proyecto dentro de su propia estructura. «Quizá, el ayuntamiento somos los más interesados en que esas cuestiones que yo estoy planteando se aclaren, porque podemos hablar de cantidades importantes», añadió el concejal, que ha indicado que no están claras algunos aspectos referidos a dónde finaliza la responsabilidad actual de la Confederación Hidrográfica y dónde comienza la del ayuntamiento.
Blanco reconoce que una vez que acabe la limpieza, que se encuentra prácticamente finalizada, surgen diversas cuestiones que se deben resolver; puesto que el ayuntamiento es el propietario del pantano, la responsabilidad de su mantenimiento y los medios de seguridad que se tengan que implantar tras la finalización de los trabajos de dragado y limpieza correspondería, al consistorio, que colabora con el 5% del presupuesto a la limpieza del embalse.
«Las obras acaban, pero ahora tenemos que empezar a ver qué hacemos con el pantano», aseguró Blanco. Además, el concejal se encuentra a la espera de poder mantener otra reunión con representantes de la Confederación.
Uno de los aspectos que más preocupa al concejal de Medio Natural es la aportación de las aguas de Alpera, más concretamente, la acequia de Alpera.
Blanco insiste en que se trata de una reivindicación que el ayuntamiento expuso en el proyecto por parte del anterior equipo de gobierno y en la que se solicita que la acequia de Alpera debe llegar hasta la botana lo máximo posible para evitar la pérdida de agua. «Las obras están acabadas y actuaciones en la acequia de Alpera no se ha hecho ninguna; el temor del ayuntamiento es enorme», añadió Pascual Blanco.
En el caso de que esta actuación no se realice, el edil considera que entonces, la limpieza y dragado del pantano sería una obra inacabada, puesto que se trata de una reivindicación histórica.