Costó más de lo normal pero, desde ayer, ya hay un acuerdo sobre las tablas salariales del convenio del campo, uno de los mayores de la provincia, con cerca de 10.000 trabajadores afectados.
Desde las federaciones agroalimentarias de los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT) y desde la patronal del sector, Asaja, se anunciaba un «principio de acuerdo» que, salvo error o cambios de última hora, entraría en vigor a principio de 2010.
La clave del convenio, según admitían ayer todas las partes, es que todos ceden. La patronal renuncia a su pretensión de descontar de la subida una parte del pago a cuenta que se había hecho hace un año, y los sindicatos aceptan que la subida se quede en el IPC real, en vez del IPC más medio punto que pedían.
«Lo que se ha firmado es un acta -señalaba ayer Ana Albadalejo, secretaria provincial de la Federación Agroalimentaria- y, con esta acta, se acuerda actualizar las tablas, lo que se hará efectivo en enero, que es cuando tendremos el cálculo del IPC real correspondiente al 2009».
Una de las claves que han permitido el desbloqueo ha sido, precisamente, que el IPC real acabará el año en positivo. Por muy poco, pero en positivo. La otra clave es la renuncia, por parte de Asaja, a su pretensión de descontar una parte de las cantidades que se habían abonado a cuenta.
Como se recordará, el convenio del campo se firmó en el año 2008. Ese año, los trabajadores recibieron un pago a cuenta, de un 4%, pero el IPC cerró el año en el 1,4%, de forma que hubo una diferencia entre la subida prevista y la real de un 2,6%.
En este punto, y antes de actualizar las tablas salariales del 2009, Asaja pedía que se tuviese en cuenta el «sobreesfuerzo» que sus miembros habían hecho, compensándolo en las tablas de ese año.
Durante casi todo un año, la firma de las tablas quedó paralizada, «pero en los últimos días, hubo varios acercamientos significativos, que han permitido llegar a un principio de acuerdo» señalaba el presidente de la organización agraria en Albacete, José Pèrez Cuenca.
Por su parte, y en una nota de prensa, la Federación Agroalimentaria de UGT se centraba en aspectos más prácticos, al señalar que «todos aquellos trabajadores que hayan desempeñado sus labores de manera temporal durante las campañas agrícolas deben revisar sus nóminas, o bien pasarse por el sindicato para comprobar que tienen sus salarios actualizados».
Así, tras este acuerdo, las tablas del 2008 pasan a definitivas y quedan como provisionales las del año 2009con un compromiso de incremento de IPC real. «Estos incrementos tienen efectos en todas las categorías profesionales», señala UGT.
