El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, consideró «un tanto curiosa» la reunión que ayer mantuvieron los Gobiernos de Murcia y la Comunidad Valenciana «para ver cómo se coordinan entre sí en contra de los intereses de Castilla-La Mancha en relación al agua».
Barreda se refirió al encuentro de los gobiernos valenciano y murciano, ayer en Murcia, para establecer una estrategia común respecto a los nuevos planes hidrológicos de las cuencas del Tajo y del Ebro, que pretenden aumentar los caudales ecológicos de estos ríos.
Barreda lamentó la situación que se ha producido en Castilla-La Mancha «a diferencia de lo ocurrido en Murcia y Valencia, donde todos los sectores sociales y todas las fuerzas políticas han sido capaces de ponerse de acuerdo para tener una única postura y defender unos únicos intereses, cada uno los de su región».
En Castilla-La Mancha «deberíamos haber hecho lo mismo, —añadió—es decir, que todas las fuerzas políticas deberían haber apoyado a la sociedad y a su Gobierno para defender los intereses hidrológicos de nuestra Comunidad autónoma».
Por su parte, el secretario general del PP de Castilla-La Mancha, Vicente Tirado, afirmó ayer que su partido siempre apoyará las soluciones que sean buenas para esta región en materia de agua, en relación con la reunión que mantuvieron los gobiernos de Murcia y Valencia sobre este asunto.
Tirado indicó que el presidente Barreda no ha sido capaz de defender los intereses de la región en esta materia, ya que fue incapaz de transmitir un alegato en defensa del agua en la reunión del Consejo Territorial del PSOE, que preside el propio jefe del Ejecutivo regional.
Finalmente, el consejero de Agricultura y Agua de la Región de Murcia, Antonio Cerdá, y el consejero de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda de la Comunidad Valenciana, Juan Cotino, aseguraron que van a trabajar «codo con codo» para lograr que el Plan Hidrológico del Tajo «no incluya un caudal ecológico torticero y elaborado con mala fe» para la cabecera del río. Con este fin, proponen dialogar con Gobierno central, pero no descartan vías judiciales.
Para el consejero murciano, el borrador del Plan de Cuenca es «preocupante», porque en él «aparece una cifra en el caudal ecológico, cosa que no tenía porque aparecer, y porque ese Plan de Cuenca del Tajo, ignora la existencia del trasvase Tajo-Segura» y otras incongruencias que «deberemos analizar».