La Comisión Europea afeó ayer el espectáculo que está dando España en la gestión del agua por la guerra que mantienen las comunidades. El director general de Medio Ambiente, Karl Falkenberg, en un acto en Madrid, pidió al Gobierno que acelere el envío a Bruselas de los planes de cuenca que deben ordenar la gestión del agua.
"Sé que hay problemas de competencia en las comunidades autónomas, pero vengo de Viena, de la firma de un acuerdo entre 14 Estados soberanos para gestionar el Danubio. Después de eso, estoy seguro de que en España podrán ponerse de acuerdo", ironizó Falkenberg en Madrid, en la clausura de un seminario internacional sobre sequía y cambio climático. Entre el público corrió un murmullo sarcástico.
Sentado junto a Falkenberg estaba el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, que recogió el guante: «Es más difícil llegar a acuerdos para el Júcar que para el Danubio, pero lo estamos intentando».