Bruselas está empeñada en reconducir la política agraria de la Unión Europea y ayer propuso reducir las ayudas directas para el sector hasta un 13% en 2013 y recortarlas aún más en el caso de quienes reciben por encima de 100.000 euros anuales, es decir, los propietarios de latifundios. Con este dinero, la Comisión pretende reforzar otras acciones de desarrollo rural. En todo caso, y a falta de cálculos precisos, la CE auguró que España no será uno de los países más afectados por la medida, que a decir del Ejecutivo comunitario tendrá su impacto principal en Reino Unido, República Checa y Dinamarca.

La iniciativa legal aprobada ayer en el Parlamento Europeo supone el pistoletazo de salida para la modificación de la PAC, un proceso que se ha dado en llamar chequeo médico y que es uno de los caballos de batalla de la comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel.

El proyecto para la reforma de la Política Agraria Común incluye «ajustes» para el período que va de 2009 a 2013 y criterios para diseñarla después de 2013, teniendo en cuenta que la UE va a realizar el año próximo una revisión general de su presupuesto y asumiendo retos como los precios o el cambio climático, según Fischer.

La propuesta recoge un incremento de las rebajas en los pagos directos de los agricultores, para destinar ese dinero a otro capítulo de la PAC, el desarrollo rural (medidas en el campo distintas o complementarias a la agricultura cofinanciadas por los Estados miembros), argumentó la comisaria.

En estos momentos ya se aplica una reducción de las subvenciones del 5%, lo que se conoce como modulación o trasvase al desarrollo rural. Bruselas pretende elevar ese porcentaje un 2% anual desde 2010, de manera que en 2013 esta partida decrecería un 13%.

con matices. Asimismo, la CE desea limitar las ayudas a los productores que perciben más de 100.000 euros al año, lo que se aplicaría desde que entrara en vigor la reforma (2009). El proyecto indica que para este colectivo la rebaja será del 10%; para los que obtienen 200.000, del 25%, y del 45% para los que reciben más de 300.000. La comisaria apuntó que éstas son solamente las primeras ideas y que habría que distinguir entre las explotaciones con muchos propietarios y trabajadores y aquellas de un solo titular y pocos empleados.

Además, la CE confirmó su propuesta de que acaben las cuotas lecheras en marzo de 2015, aunque admitió que entretanto es necesario «estudiar medidas» para que haya una transición suave hacia esa liberalización.