Después de casi un año y medio de retraso y una negociación difícil, con movilizaciones incluidas, la patronal Asaja y el sindicato Comisiones Obreras firmaron ayer el convenio del campo, que afecta a 10.000 trabajadores en la provincia.
Las partes llegaron con un principio de acuerdo bajo el brazo que, finalmente, ha podido materializarse aunque sin contar con el apoyo del otro sindicato mayoritario, UGT, que consideró insuficiente la subida salarial propuesta.
El incremento salarial ha sido el principal escollo de las negociaciones, que se ha resuelto con un avance del 0,8% para 2010, que los trabajadores percibirán en sus nóminas con efecto retroactivo, y del 2,7% para 2011.
Temporeros
La representante de la Federación Agroalimentaria de CC OO, Ana Albadalejo, señaló que el sindicato ha accedido a formalizar el convenio como un acto de «responsabilidad» hacia los trabajadores del sector y, muy especialmente, con la mirada puesta en el colectivo de trabajadores eventuales , que serían «los principales perjudicados» si no se hubiese alcanzado un acuerdo.
En este sentido, la representante de CC OO recordó que «estamos a apenas unas semanas del inicio de la campaña del ajo», la primera de las campañas agrarias del verano, por lo que urgía lograr una solución y que estos profesionales «puedan cobrar los atrasos del año pasado».
Albadalejo señaló que, teniendo en cuenta que el planteamiento de la patronal pasaba por una subida «cero» de los salarios, el convenio que se ha suscrito puede considerarse «positivo», y recordó que los profesionales por cuenta ajena también van a ver mejoradas sus condiciones laborales a partir del 1 de enero de 2012, fecha en la que está previsto que entre en vigor la desaparición del Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social (Reass).
Por su parte, el presidente de Asaja Albacete, José Pérez Cuenca, subrayó que el convenio ha sido posible gracias a que todas las partes han sido capaces de «ceder» en sus posicionamientos para conseguir, al final, un documento que «puede ser útil para empresarios y trabajadores».
Pérez Cuenca afirmó que para el sector resulta difícil mejorar los salarios debido a la situación por la que atraviesa el campo, afectado por los bajos precios de los productos agrícolas y el incremento de los costes. A este respecto, el representante de Asaja indicó que tener en cuenta el factor del IPC en la negociación colectiva no es factible «si éste no coincide con el rendimiento de las producciones, como estamos viendo que ocurre cada año».
Tanto UGT como CC OO han convocado, en el último año, diversas movilizaciones para protestar por el estancamiento de las negociaciones con la patronal agraria. La última, que finalmente fue cancelada tras alcanzarse un principio de acuerdo, iba a celebrarse coincidiendo con la inauguración, el pasado 19 de mayo, de la Feria Agrícola y Ganadera, Expovicaman.