La Junta y la organización agraria COAG quieren que la Unión Europea sea más dura con los productos alimentarios que vienen importados de otros países. Así lo corroboraron ayer tanto el consejero de Agricultura como el secretario regional de la organización agraria, que mantuvieron una reunión para fijar posiciones de cara a debatir la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) que tiene que aplicar Bruselas a partir de 2013.
«No podemos en Europa depender de países emergentes, de los que no sabemos cómo se cultiva», advirtió ayer Alfonso Marín, de COAG. Recordó que el dinero de las ayudas europeas que llega con la PAC no sólo va para apoyar la producción de los agricultores, ni para mantener el equilibrio medioambiental, sino también para garantizar una alimentación lo más sana posible, «algo de lo que no tenemos esa certeza con esos productos que vienen de fuera de la Unión Europea».
La misma posición mantuvo ayer el consejero de Agricultura, que comentó que hay casos en los que en Europa se prohibe el uso de determinados fitosanitarios en el cultivo, pero luego se permite la venta de productos de otros países en los que sí se utilizan. «Tenemos que garantizar al consumidor que todos los productos cumplen los requisitos de seguridad y salud alimentaria», reclamó José Luis Martínez Guijarro, «porque en estos momentos se da la paradoja de que algunas exigencias a agricultores de la UE luego no se tienen en cuenta en productos que son originarios de terceros países».
Intervenir en el mercado.
Desde el Gobierno y desde COAG también han coincidido en aprovechar la reforma de la PAC para establecer más mecanismos de intervención en el mercado. «Esta nueva PAC no sólo debe tener ayudas directas al agricultor, sino que esas ayudas puedan hacer que en un momento determinado pueda cambiar el rumbo de los precios de esos productos», reclamó el representante de la organización agraria. «Es básico que cuando haya una caída de precio por debajo de un nivel, se articulen los mecanismos que hagan que se recupere el precio de esos productos para garantizar la rentabilidad de las explotaciones», añadió el consejero.
La reunión con COAG es la primera de una ronda de contactos que mantendrá la Junta con otras organizaciones del campo para fijar un frente común en la PAC.