LOS DATOS

Albacete. Presenta muy buenos niveles de hidrocarburos, nitratos, plaguicidas y COV y un buen nivel de trihalometanos.

Cuenca. Presenta muy buenos niveles de hidrocarcarburos, nitratos, plaguicidas, COV y trihalometanos.

Toledo. Presenta muy buenos niveles de hidrocarcarburos, nitratos, plaguicidas, COV y un nivel malo de trihalometanos.

El agua en Albacete es de gran calidad así se desprende de un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre el estado del líquido elemento en 60 ciudades españolas.

Según este trabajo, realizado sobre el estado de las aguas en el año 2009, en el que la OCU investiga la calidad del tratamiento y analiza si el agua que bebemos está libre de sustancias nocivas, se analizaron seis tipos de contaminantes que pueden delatar un trabajo deficiente a la hora de tratar las aguas y al distribuirlas, estudios en los que el agua de nuestra provincia ha salido bien parada.

Para establecer si el nivel de estos contaminantes es muy bueno (poco contaminante) o muy malo (mucho), la OCU se ha fijado en los niveles legales permitidos de hidrocarburos, nitratos, plaguicidas, compuestos orgánicos procedentes de la quema de combustibles (COV) y trihalometanos.

Concretamente los resultados de la provincia de Albacete en lo que se refiere a los elementos analizados son muy buenos, a excepción de los contenidos en trihalometanos (compuestos volátiles que se forman al reaccionar el cloro y la materia orgánica) que son sólo buenos.

Estos trihalometanos se forman si se añade mucho cloro para desinfectar el agua o si la carga orgánica, de forma natural o por vertidos de aguas mal depuradas, es muy alta. Sus efectos sobre la salud pueden producir daños en el hígado, los riñones o el sistema nervioso central.

Aunque los resultados en nuestra provincia son muy positivos, cabe recordar que aunque el agua de nuestra provincia es muy buena, en lo que se refiere al nivel de estos contaminantes, el estudio no evalúa la calidad global del agua, en el que se incluirían variantes como la pureza, el pH o la salinidad, que dependen mucho del origen del agua que no es un factor fácil de modificar. Estos elementos si fueron analizados en el anterior estudio realizado por la OCU en 2006, en el que se decía que el agua de Albacete presentaba una alta dureza y una escasa conductividad, lo que no resulta nada bueno para los enfermos cardiovasculares, ni para el sistema urinario.

En la Región

En Castilla-La Mancha la capital de provincia que mejor nota recibe es Cuenca, cuyos niveles de todos estos contaminantes son muy buenos.

La ciudad peor valorada es Toledo, ya que su nivel de trihalometanos es malo. Por su parte, Guadalajara tiene idénticos niveles a Albacete y Ciudad Real tiene los niveles muy buenos a excepción de los de trihalometanos que es aceptable y el de nitratos, que sólo es bueno.

En resumen el estudio concluye que en general en nuestro país casi todos los contaminantes en el agua del grifo han disminuido con respecto a su anterior estudio del año 2006.

Por todo ello y tras la realización de otro estudio sobre aguas envasadas, la OCU asegura que estas no son imprescindibles para mantener la salud y reivindica que se pida la jarra de agua del grifo en los restaurantes, recordando además que este tipo de agua no genera residuos.

El precio medio del litro de agua en supermercados de las marcas analizadas es de 0,26 euros de la de sin gas y de 0,68 euros de la de con gas, con lo que el ahorro al beber agua del grifo es considerable.