La cuenca del Júcar sigue estando entre las más deficitarias de la península pese a que desde principios de año no ha parado de incrementar sus reservas hídricas. Sólo la cuenca del Segura está más en precario.
Los embalses de la Confederación Hidrográfica del Júcar han ganado desde principios de año 222 hectómetros cúbicos y esta semana han alcanzado la mayor reserva de agua de los dos últimos años, con 911,62 hectómetros cúbicos, lo que representa el 27,24% de los 3.346,6 hectómetros de su capacidad total.
La reserva de agua ha disminuido por primera vez desde hace seis meses y el agua acumulada en los embalses peninsulares supone un 0,3% menos que hace una semana. Según los datos publicados ayer por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, la reserva hidráulica se sitúa en 156 hectómetros cúbicos, el 59,9% de la capacidad total de los embalses.
La disminución ha afectado prácticamente a todas las cuencas, salvo las catalanas, que han registrado un incremento de su reserva de agua del 2,4%, y se encuentran ya al 60,2% de su capacidad, casi diez puntos más que hace un año.
También han aumentado sus reservas los embalses de la cuenca del Duero, un 0,5%; y los del Ebro, un 0,3%.
Las cuencas del Segura y del Júcar siguen siendo las más deficitarias y se encuentran al 22,4 y al 27,1%, respectivamente. Por debajo del 50% continúan los embalses de la cuenca mediterránea andaluza (29,6%), la atlántica andaluza (41,1%) y los del Guadalquivir (43,5%).
Los embalses del País Vasco son los únicos que están al cien por cien desde hace tres semanas. Las precipitaciones han afectado a toda la península y la máxima se ha producido en San Sebastián, con 48 litros por metro cuadrado.
Han sido más abundantes en la vertiente atlántica (7 litros por metro cuadrado), menos que la media de 9,3 litros por metro cuadrado