Se han cumplido cinco años desde que el municipio hellinero realizó las primeras actuaciones para preservar sus reservas acuíferas de la planificación realizada por la Confederación Hidrográfica del Segura para enviar agua a la Región de Murcia, durante una etapa en que la sequía afectó profundamente a las cuencas de los ríos Júcar, Segura y Tajo.
En este tiempo, el tema del agua ha tenido diferentes episodios significativos, con tres protagonistas destacados: de una parte el organismo de cuenca, que durante la mayor parte de este contencioso estuvo presidido por José Salvador Fuentes Zorita y por la otra el Ayuntamiento local, cuyo alcalde, Diego García Caro, ha venido mostrando una oposición radical a este trasvase de las aguas subterráneas. Igualmente, en esta reivindicación permanente por defender los recursos hídricos ha intervenido de manera enérgica la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que ha entablado todas las acciones legales pertinentes con el fin de evitar que el agua de esta región se utilizase en la vecina para diferentes fines.
Es también importante resaltar que el regidor hellinero ha sido reiterativo en indicar que nunca se negaría el agua a Murcia, siempre que esta fuese necesaria para el consumo humano, pero de la misma forma, no estaba dispuesto a que con la misma se alimentasen explotaciones agrarias creadas en zonas anteriormente montuosas, o proyectos urbanísticos desarrollados preferentemente para potenciar los recursos del turísticos en el sureste.
Por otro lado y aunque el enfrentamiento con la Confederación alcanzaba cotas más elevadas durante estas cinco últimas anualidades, no deben olvidarse otros hechos anteriores, que igualmente resultaron significativos en esta batalla por los recursos hídricos. Entre los mismos cabe destacar el proyecto que afectaba al pantano de Camarillas y el túnel Talave-Cenajo, que igualmente provocó una oposición férrea por parte del Ayuntamiento de Hellín y el Gobierno regional al proyecto inicialmente previsto para llevar a cabo esta infraestructura.
Si sumamos esta etapa, el conflicto sobre el agua se alarga más en el tiempo, aunque estos contenciosos quedaron en su momento cerrados con una revisión sumamente importante en cuanto a las condiciones de realización del túnel y, especialmente, en la forma en que se realizaría el control del agua trasvasada por el mismo, cuando fuese necesario utilizarlo, de acuerdo a la finalidad para la que fue creado.
A pesar de aquél episodio concluyó en su momento, es importante destacar que la oposición a la concepción del mismo provocó el primer enfrentamiento serio entre el alcalde hellinero y sus compañeros de partido en el Gobierno de España, concretamente con la entonces ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.