El PP en Les Corts se ha mostrado contrario a reclamar la concesión de agua propia para la Ribera como reclamaban los partidos de la oposición y la sociedad civil de la comarca.
En este caso su rechazo ha sido a la propuesta propuesta socialista para que la Generalitat pida al Ministerio de Medio Ambiente el otorgamiento de la concesión, dentro del nuevo Plan de Cuenca del Júcar, para suministrar 30 hectómetros cúbicos de agua potable no contaminada para abastecer a los municipios.
La proposición no de ley ha sido defendida por el diputado del PSPV Francesc Signes en la Comisión de Medio Ambiente, Agua y Ordenación del Territorio de Les Corts, y ha contado con el apoyo de los representantes de Compromís y Esquerra Unida y el voto en contra de los populares.
Signes ha defendido que es «intolerable que 200.000 habitantes de La Ribera sufran la discriminación de la Generalitat y el Gobierno, tras 20 años sin poder beber agua potable», a pesar de estar en el río Júcar.
Cabe recordar que pese a que todos los ayuntamientos de la Ribera pidieron en las alegaciones al Plan del Júcar que se incluyera esta cantidad de hectómetros cúbicos, finalmente el Plan sólo concede 10 por medio de una permuta con los regantes.
Signes ha amenazado con ir a los tribunales porque no van a «tolerar que se nos robe el agua y se dé a otras zonas que no tienen más derecho que la Ribera».
La diputada del PP Maritina Hernández ha defendido la política popular en materia de agua y ha catalogado el Plan de Cuenca de «ser el mejor posible». «Hablar de que una comarca tiene más derecho que otra es peligroso. Todos tienen derecho para uso de boca y para regadío y esa es la política del PP», ha señalado Hernández.
Por su parte, el diputado de Esquerra Unida Lluis Torró ha asegurado que el caso de la comarca es «la demostración más palpable de que se hacen las cosas de forma incorrecta y no cabe en la cabeza que la comarca por la que pasa el río Júcar no tenga derecho directo sobre el agua que tiene ante su casa».
El conseller de Agricultura, José Císcar, también ha hablado del Plan de Cuenca del Júcar en su visita a Carlet. El conseller ha defendido la postura de la Generalitat y sobre la inclusión de un acuerdo que posibilite la realización de una segunda toma para el trasvase Júcar-Vinalopó ha señalado que «el acuerdo incluye que se utilice la azud y también agua para poder beber y compensar los precios. El agua para regadío de Cullera cuesta lo mismo que el agua desalada. Un coste que no pueden asumir los regantes».
Císcar ha asegurado que la toma de Cullera se utilizará ya que sino el Estado debería pagar 120 millones de euros a la Unión Europea. Sin embargo, las críticas surgidas en la Ribera por el reparto del agua las ha zanjado apuntando a las prioridades que se establecen «forma histórica». «La preferencia es para el USUJ, la Mancha Oriental y el Canal Júcar Turia y después se reparte el resto», ha comentado Císcar que sigue apelando a una solución satisfactoria para todas las partes.
ENLACE A NOTICIA: http://www.lasprovincias.es/v/20140507/ribera-costera/rechaza-pedir-gobierno-concesion-20140507.html