El mismo día, el mismo escenario e idéntica reivindicación. Un año después, el próximo 20 de junio, Talavera volverá a ser el epicentro de la batalla del agua. La convocatoria no parte en esta ocasión de la Plataforma en Defensa de los ríos Tajo y Alberche, sino de la Ejecutiva Provincial del PSOE, aunque su vicesecretario general, Jesús Fernández Vaquero, recalcó ayer que el acto no tiene vocación «unipartidista» y que se evitarán los reproches y los enfrentamientos. El objetivo es arrancar en la ciudad la misma movilización ciudadana que existe en el Levante y aprovechar el acto para ejercer presión sobre la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) para que mantenga los caudales mínimos en la provincia, ya que se prevé que el borrador del Plan de Cuenca se hará público un mes después de esta convocatoria.
Nos jugamos muchísimo toda la provincia y la región», señaló Fernández Vaquero en una rueda de prensa acompañado del secretario del PSOE local, José Miguel Camacho. El anuncio se hizo ayer y este mismo lunes se mantendrá una reunión para ir perfilando la organización. La movilización comenzará por los alcaldes socialistas, a los que se requerirá su implicación en el comité provincial que se celebrará el día 8. Después, se convocará a este segundo 20-J a los miembros de la Mesa del Agua, partidos políticos, instituciones de ámbito provincial y autonómico, organizaciones empresariales y grupos ecologistas de toda la cuenca, desde el nacimiento hasta la desembocadura, a través de una invitación formal, «con seriedad», subrayó Fernández Vaquero. El primero en recibirla será el presidente regional y «parece razonable» que vuelva a estar en Talavera, aunque la confirmación todavía no se ha producido. También se confía en la presencia de la Plataforma.
La convocatoria se sucede un día después de los abucheos que recibió Cospedal en la localidad de Sacedón. El secretario general de Juventudes Socialistas en España explicó que la causa de lo ocurrido radica en el ‘no’ que dio Cospedal al Estatuto en el Congreso de los Diputados. «Antes ella iba a cualquier municipio y no pasaba nada», recordó.
Sergio Gutiérrez también pidió prudencia a los dirigentes del PP que ayer dejaron caer que los manifestantes estaban relacionados con cargos del PSOE, «como si tener el carné de un partido político imposibilitara la protesta», añadió. Señaló que con estas acusaciones, Cospedal está añadiendo un escalón a su «psicosis política particular», que glosó con los reproches a policías y jueces en el caso Gürtel.