El Grupo Parlamentario Socialista ha registrado en las Cortes una iniciativa con la que pretende que el Gobierno de Cospedal promueva un cambio en la ley que regula el trasvase Tajo-Segura y lograr así que «no se produzcan episodios» como el de este miércoles, cuando se aprobó una derivación de agua de 101 hectómetros cúbicos, de los que «más de 70» son para regadío. Así lo anunció el parlamentario del PSOE José Molina, que señaló que su grupo, a través de una interpelación, busca que el Gobierno comparezca «para aclarar su postura» en relación al trasvase y se vote una resolución para modificar una ley que «después de 30 años permite que se produzca este auténtico atraco al agua».
En cuanto al trasvase aprobado, Molina lamentó que el Ejecutivo regional «no haya dicho todavía ni media palabra» para oponerse a esta nueva derivación de agua, lo que coincide con la postura de los regantes murcianos que, según el socialista, han reconocido que se ha producido «un cambio de actitud de los representantes castellano-manchegos, que antes se oponían tajantemente al agua para riego y sólo aceptaban el agua para beber».
Por su parte, el secretario regional de los populares, Vicente Tirado, aseguró ayer que «el Partido Popular es solución y el PSOE problemas para el agua» mientras que el consejero portavoz, Leandro Esteban, manifestó su convencimiento de que la situación en materia de agua «pronto cambiará con buenas noticias para Castilla-La Mancha». Añadió que espera que muy pronto la Región tenga «la situación resuelta desde el punto de vista de la planificación» del Tajo.
Desde Izquierda Unida calificaron de «irresponsable» para la cabecera del Tajo la aprobación del nuevo trasvase y pidió al Gobierno regional «que cumpla con la normativa europea». El coordinador regional de IU, Daniel Martínez, señaló «que es el momento de que el Gobierno regional tome medidas valientes cumpliendo con los compromisos y la normativa europea»,
Plan de cuenca
Por otra parte, el grupo popular en el Senado desestimó ayer la moción presentada por los socialistas solicitando que se presente de forma inmediata el Plan de la Cuenca del Tajo y que se alcancen los objetivos ambientales fijados en la Directiva Marco del Agua.
El senador socialista por Guadalajara, Jesús Alique, que fue el encargado de defender la moción ante la Comisión de Medio Ambiente y Cambio Climático, aseguró que las llaves del agua deben estar en buenas manos y apeló a la cordura y al buen juicio para que el Gobierno presente el plan.