La historia del agua ha abierto un nuevo capítulo centrado en los futuros planes de cuenca, con el ruido de fondo de las crecientes críticas de Castilla-La Mancha a la gestión del agua en la cuenca del Segura a cuenta de los campos de golf. El Ministerio de Medio Ambiente tuvo ayer ocasión de intervenir en la polémica abierta por el Gobierno de José María Barreda tras la retirada del Estatuto y zanjar una cuestión que está deteriorando a marchas forzadas las relaciones entre ambas regiones . Pero no lo hizo. En Toledo, la ministra Elena Espinosa se salió por la tangente y dijo que desconocía el informe que cuestiona el uso de los caudales del Tajo en la cuenca del Segura. Pudo haber defendido la gestión de la Confederación y recordar que, según la ley, debe utilizarse agua depurada o de pozos, pero señaló que tal estudio tenía que ser analizado primero.
En otro escenario, Murcia, el secretario de Estado de Agua, Josep Puxeu, defendió la eficaz gestión del agua en el Segura y apostó por el consenso en la nueva planificación hidrológica. No entró de lleno en la polémica desatada por Castilla-La Mancha, que insiste a diario en la utilización del agua del Tajo para regar los campos de golf. La nueva presidente de la Confederación del Segura, Charo Quesada, que ayer tomó posesión, comentó que Castilla-La Mancha tiene representantes en los órganos de la cuenca para saber cómo se gestiona el agua del Tajo y cómo se tramitan los campos de golf. «Si tienen alguna duda, la aclararemos.»
Quien ha respondido con contundencia ha sido Pedro Saura, que ha comunicado la intención del PSRM-PSOE de «estudiar la presentación de una denuncia ante la Unión Europea contra Castilla-La Mancha por un posible delito medioambiental». El líder socialista murciano ha pedido al Gobierno central que audite el uso que hace esta región de las aguas del Guadiana y del Tajo. Cree que puede haber base para actuar «por los miles de pozos ilegales de la cuenca del Guadiana», explicó ayer a esta Redacción.
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, lamentó que la ministra «no se haya mojado en Toledo delante de Barreda. Sabe que aquí se riega correctamente, aunque entiendo que haya preferido apoyar al presidente socialista de Castilla-La Mancha». Por su parte, la consejera de Presidencia de Murcia, María Pedro Reverte, señaló que el autor del informe realizado por el Centro Regional de Estudios del Agua (CREA), Fernando Ortega, fue «director general del Agua en el Gobierno de Castilla-La Mancha», por lo que puso en duda su imparcialidad.
En Toledo, Elena Espinosa, señaló en una rueda de prensa conjunta con Barreda que mantiene el objetivo de lograr un «gran pacto sobre el agua» y ha culpado a la dirigente del PP María Dolores de Cospedal de que haya fracasado la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, con la que «empezaba» ese acuerdo, informa Europa Press. Dijo que no se había pronunciado antes sobre el Estatuto porque quería ser «absolutamente respetuosa con lo que decidiesen los parlamentos», pero que ahora, al igual que hace la ciudadanía, puede hacer «un análisis porque ya ha pasado» la retirada del Estatuto del Congreso. Sobre el estudio publicado por la Universidad de Castilla-La Mancha sobre el supuesto uso irregular en Murcia del agua del Tajo, Espinosa respondió que el Ministerio aún carece del informe. «Los todos los informes hay que verlos, estudiarlos, y a partir de ahí tomar la determinación que sea», añadió.
Sobre el trasvase Tajo-Segura, Barreda manifestó que «frente a intereses no valen razones» y ha lamentado los creados en Murcia, donde «todo les parece insuficiente».
Cerdá: «Una barbaridad»
El consejero Cerdá considera «una barbaridad» que la ministra «haya declarado que el Estatuto era el inicio de un pacto de Estado sobre agua. Esa ley que ahora se ha retirado suponía que el Estado hacía dejación de sus competencias. La reserva de 4.000 hectómetros significaba el cierre del acueducto y la pérdida de miles de empleos». «¿Acaso no sabía la ministra que este texto era inconstitucional?», señaló el consejero para cuestionar que Espinosa se ponga del lado de Castilla-La Mancha. «Es normal que tenga que apoyar a Barreda porque es el responsable del fracaso. El PP, sin embargo, ha actuado con interés de Estado». Emplazó a Barreda a que diga un solo proyecto presentado por su Gobierno que no se haya realizado por falta de agua. «Ha habido agua hasta para Seseña, que es una ciudad fantasma».
El Tribunal Supremo, por otra parte, ha desestimado otro recurso de Castilla-La Mancha a un trasvase para riego del Tajo al Segura, según comentó ayer José Manuel claver, presidente del Sindicato de Regantes. Este fallo se suma a los anteriores, en los que el alto tribunal aprecia razones políticas de los recursos de esta Comunidad, que alega sistemáticamente contra los desembalses para los regadíos del Segura.