Cerca de 50 entidades ecologistas y plataformas ciudadanas acordaron ayer en Tortosa (Tarragona)realizar protestas para reclamar un cambio en la política hídrica del Gobierno y en los nuevos planes hidrológicos de las cuencas de los ríos, al considerar que se «incumple» la normativa europea. En la reunión, convocada por la Plataforma en Defensa del Ebro (PDE), se reclamó que el Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro contemple unos caudales ambientales que puedan garantizar la supervivencia del Delta. La primera protesta tendrá lugar el próximo mayo en una localidad de Cataluña por concretar y a la que seguirá otra más a nivel estatal.
El portavoz de la PDE, Manolo Tomàs, denunció que «el viejo estilo de los planes hidrológicos del PP se está reafirmando de forma distinta». Según él, en la elaboración de los planes hidrológicos «se reafirma el reparto del agua del Ebro sin fijar ningún caudal ambiental». Tomàs también se hizo eco de la preocupación del movimiento antitrasvase del tramo final del Ebro porque «nos consta que las reservas del pacto del Agua de Aragón rozan lo que sería la integridad del agua disponible en el río» y no permitiría la llegada de suficiente agua al Delta.